El 13 de octubre, un Juzgado de Garantías con sede en Ensenada liberó a un joven oriundo del Valle de San Quintín que asesinó a su amigo en septiembre de 2011 cuando tenía entre 14 y 15 años de edad; la defensoría legal del homicida apeló a las reformas a la Ley Nacional del Sistema Integral de Justicia Penal para Adolescentes aprobadas por la Cámara de Diputados el 14 de junio y oficializadas dos días después.
Según el administrador judicial del Nuevo Sistema de Justicia Penal en Baja California, Luis Villareal, la esencia de la reforma deriva en que la pena máxima para un adolescente en México se reduce de diez a cinco años, ya que se buscan nuevas estrategias de reinserción social para los menores de edad que cometan crímenes.
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El joven homicida estuvo recluido en el Centro de Tratamiento para Adolescentes durante cinco años y 12 días, por lo que cumplió con el plazo contenido en la legislación en el Artículo 145, cuyo último párrafo a la letra expresa: “La duración máxima del internamiento podrá ser de hasta cinco años en los casos de homicidio calificado, violación tumultuaria, en los casos de secuestro; hechos señalados como delitos en materia de trata de personas y delincuencia organizada”.
Por lo anterior, un defensor de oficio solicitó la audiencia ante el Poder Judicial de Baja California, que terminó por otorgar la libertad. Inicialmente, el 30 de septiembre de 2012, había sido sentenciado a nueve años de internamiento.
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En entrevista con ZETA, Villareal expuso que tras un cuatrimestre de entrada en vigor la reforma ha habido dos solicitudes en Ensenada, dos en Tijuana y cinco en Mexicali; solo una de las solicitudes radicada en territorio tijuanense no procedió, debido a que el joven no cumplía con la buena conducta y cumplimiento al reglamento del Centro de Tratamiento para Adolescentes.
Cabe destacar que el funcionario enfatizó que dichas reformas a la legislación en materia de justicia para adolescentes no están relacionadas con la modificación y creación de Leyes que constituyeron la entrada en vigor del Nuevo Sistema de Justicia Penal, ya que las disposiciones en materia de adolescentes tienen su propio marco legal.
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