Durante su visita a Tijuana –el martes 4 de octubre–, el periodista y escritor, Alejandro Almazán, centró su participación en el conversatorio “Los Desafíos del Periodismo en la Era Digital”, en la degradación de la práctica periodística tras el surgimiento de las redes sociales.
En entrevista con ZETA, antes de su intervención en la Universidad Iberoamericana de Tijuana, Almazán comentó que el gran problema es “que todo mundo se cree periodista”, con la falsa creencia que las redes sociales son un medio y no una herramienta de comunicación, parafraseando a Umberto Eco: “se le ha abierto la puerta a los imbéciles”.
El colaborador de la revista Gatopardo y premio García Márquez de Periodismo en el año 2013, dijo que el descrédito de los medios tradicionales con el advenimiento de las redes sociales se debe a que durante el presente sexenio se ha subyugado a los medios a través del financiamiento, siendo que la falta de recursos en los sexenios panistas los llevaron a la bancarrota, por lo que le deben agradecimiento al presidente Enrique Peña Nieto.
“Eso ha hecho que el desprestigio de los medios tradicionales esté ahí y que las redes sociales sean las que estén tomando un poco su lugar. Siento que están tomando un lugar de pronto muy atrabancado, en donde tú puedes preguntar lo que sea, puedes mentarle la madre a quien sea y es ahí cuando no está chido, cuando esto se vuelve un coliseo romano”, dijo, lo que da lugar a una polarización en que “Andrés Manuel es el rey y Peña Nieto el hijo de puta”.
Es la prensa alternativa la que ha asumido la tarea de ser la voz crítica contra la administración de Peña Nieto, como lo son Animal Político, Aristegui, Proceso y SinEmbargo, lo mismo que la prensa internacional, aunque Almazán cree que existe una campaña por parte de las compañías petroleras para obtener mayor participación de las ventas del mismo, “aunque también Peña Nieto le ha echado talento para que todo mundo se lo madree”.
Sobre la posibilidad de la extinción de los medios impresos con la era digital, el periodista comentó que grandes medios internacionales han comprendido que deben volcar la mayor parte de su contenido a sus portales de internet.
“A lo mejor es el futuro inevitable, echar atrás el papel periódico y ya traer nosotros en nuestros teléfonos, los iPad´s, las computadoras los periódicos, la información…yo soy un romántico, me encanta el papel, me encanta leer los libros en papel, no me acomodo todavía en la iPad, me encantan como huelen los libros”, declaró.
Sobre libertad de expresión y el ejercicio periodístico en México –siendo que diferentes organismos señalan a este país como uno de los más peligrosos para esta profesión–, Almazán comentó que sí existe la libertad de prensa, pero no al nivel que debería ser.
“Cuando de pronto anuncias algo, te puede ir bien, digo yo puedo estar publicando cosas y no me pasa nada, pero un reportero de Veracruz publica un reportaje y van y lo matan, ¿no? No tenemos la libertad de expresión que queremos, que deseamos, pero sí la hay de pronto, la hay tanto que hay güeyes que escriben como yo casi casi mentándole la madre a Peña Nieto, es decir, sí hay de pronto esa libertad, lo que está pasando es que ya no hay espacios, se están acabando los espacios”, declaró.
“Se está devaluado el periodismo, yo creo que sí, así como el peso con el dólar, los espacios están cada vez más cerrados y donde te dan chance, están dándole chance nada más a puro morrillo, puro millenial que está haciéndola de maquilador en las redacciones y que solamente está viendo las tendencias de Twitter y Facebook para hacer notas de eso”, agregó, lo que se ha propiciado por la crisis económica que viven los medios de comunicación de manera general y principalmente los medios alternativos o no alineados.
“El periodismo es un oficio de pasión y el día que tú pierdas esa pasión, dedícate a otra cosa”, concluyó Almazán, argumentando que en las universidades no se enseña de las penurias económicas de esta práctica.