Aureliano Guzmán Loera, alias “El Guano”, hermano del exlíder del Cártel de Sinaloa, Joaquín Archivaldo, “El Chapo”, es culpado por el gobierno federal como el autor intelectual de la emboscada acontecida en Culiacán, Sinaloa, el pasado viernes 30 de septiembre, cuando 5 militares fallecieron y otros 10 resultaron heridos.
Esto lo asegura -con base en “fuentes de primer nivel del Gabinete de Seguridad”- el periodista Carlos Loret de Mola, quien lo reportó este lunes, tanto en su columna ‘Historias de Reportero’ publicada en el diario El Universal, como en su programa ‘Despierta con Loret’ transmitido en la cadena Televisa.
La investigación oficial, que leva la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), de la Procuraduría General de la República, “dio un giro”, ya que ahora presumen que fue el hermano de “El Chapo”, dicen las fuentes, quien pudo ordenar el rescate de Julio Óscar Ortiz Vega, alias “El Kevin”, que derivó en el asesinato de los soldados.
El comandante de la Tercera Región Militar, el general Alfonso Duarte Mújica, responsabilizó horas después de la emboscada a los hijos de “El Chapo”, sin embargo, el abogado del capo, José Refugio Rodríguez Núñez, aseguró que los culpables del ataque no fueron Archivaldo Iván y Alfredo Guzmán Salazar, por lo que ahora la indagatoria apunta al hermano de Guzmán Loera.
De acuerdo con las mismas fuentes de Loret de Mola, “El Kevin” no sería un alto mando del Cártel de Sinaloa, “pero sí una pieza clave, porque sabe mucho de la organización criminal […] Por esto fue el violento operativo para que no cayera detenido”, asegura el periodista.
El viernes pasado, se conoció una carta de los hijos del narcotraficante sinaloense, en la cual reiteraron que no son los autores de la emboscada que sufrió un convoy del Ejército Mexicano en Culiacán.
Hoy, un reporte del diario de circulación nacional Reforma, desde el 10 de junio al 6 de octubre del 2016, 126 personas han sido ejecutadas en el estado de Sinaloa, muertes presuntamente ligadas con actividades de grupos del narcotráfico que se disputan el Triángulo Dorado. Además, hay más de 400 familias desplazadas por la violencia relacionada al crimen organizado.
La fecha de inicio del conteo que realizó el rotativo, coincide cuando al menos medio centenar de sicarios, comandados por el líder del Cártel de los Beltrán Leyva, Alfredo Beltrán Guzmán, alias “El Mochomito”, tomó por asalto la comunidad de La Tuna.
Beltrán Guzmán es hijo de Alfredo Beltrán Leyva, “El Mochomo”, y sobrino de “El Chapo”. Estos últimos dos capos, actualmente presos, son originarios de Badiraguato, epicentro de la disputa criminal, situado en los en límites de Sinaloa con Chihuahua y Durango.
En la incursión de “El Mochomito” en La Tuna -comunidad ubicada en las montañas de la Sierra Madre Occidental- fueron asesinadas siete personas y quemadas cuatro viviendas. Incluso, María Consuelo Loera Pérez, madre de “El Chapo”, fue obligada a dejar su vivienda en el poblado.
El Comandante de la Novena Zona Militar, Rogelio Terán Contreras, confirmó al diario que “El Mochomito” le declaró la guerra a “El Guano”, hermano de “El Chapo”, cabeza de la célula del Cártel del Pacífico que opera en la sierra de Badiraguato.
“Todo para tener el control de los medios de producción, que son los sembradíos de enervantes que quieren ellos controlar”, señaló el militar, ya que es en la zona serrana del Triángulo donde se encuentran los municipios en los que las fuerzas federales han hallado la mayor cantidad de plantíos de mariguana y amapola de todo el país.
El diario La Jornada reportó a finales de septiembre, que un grupo armado al mando de Aurelio Guzmán tomó la comunidad de Huixiopa, municipio de Badiraguato, anteriormente controlado por gente de los Beltrán Leyva, que además vivían en esa región.
