Hace dos semanas a partir de la fecha de este texto (hoy seis de septiembre de 2016) el artista plástico y médico oftalmólogo Roberto Rosique, me envió un mensaje para avisarme que en la presentación de su libro: “De aquellos páramos sin cultura” yo entre otros comentadores seriamos los indicados para presentar este interesante encuentro literario entre su autor y los creadores en la Plástica de Baja California.
Ardua tarea; enorme compromiso de Rosique con los pintores representantes y de nuevas tendencias en el arte de esta zona; de esta esquina de México. También de sus presentadores.
El texto es de 361 páginas y puntos muy pequeños para mi debilitada vista. Obligado me sentí sin embargo a la revisión de la obra, cuyo patrocinio se debe al Instituto de Cultura de Baja california y al Centro Cultural Tijuana.
Roberto Rosique, Cárdenas, Tabasco, 1956, entrega su vida y su alma, si ésta existiera, a la Facultad de Artes de la UABC en Tijuana, a su consultorio y a su creatividad; es un artista visual de prestigio e indiscutible calidad. El resto de su tiempo lo dedica a escribir libros como este que hoy presentamos y que reitero: son 361 páginas. Esto se dice fácil pero cuesta un… kilo convertirlo en una realidad, primero para escribirlo y posteriormente la batalla de su publicación.
Un subtítulo que Rosique ha insertado me produjo por anticipado un enorme interés por meterme en la entraña del libro: “Tres décadas de artes en Baja California: de lo retiniano a lo conceptual”. Trascendente e interesante síntesis de lo que yo esperaba encontrar en el libro: un juicio o mejor aún análisis riguroso a partir de este acercamiento a la plástica bajacaliforniana: Lo retiniano y lo conceptual en el arte de hoy. Sin embargo, el libro no va directamente al asunto, pero por el interés que el libro suscita sin embargo obliga leerlo y estudiarlo: un análisis de la Plástica de Baja California cuidadoso, concienzudo. (Escrito por Rubén García Benavides)
