El Doctor Eladio Medina y la familia Castellanos Barone mantienen un pleito legal desde hace casi 10 años por la propiedad de predios en La Mesa. Ambos alegan acciones indebidas de sus contrapartes.
En 1980, el Doctor Eladio Medina y su esposa inscribieron la propiedad de dos terrenos (27 y 28, manzana 23) del Fraccionamiento Monte Bello, mismos que habían comprado un año anterior, y en el año 2004 obtuvieron uno más (lote 29) luego de ser favorecidos por un juicio de prescripción positiva (1276/2003).
Pero el año 2007, el matrimonio se dio cuenta que dichos lotes fueron comprados por el Arquitecto Héctor Castellanos Muños y sus familiares, quienes se respaldaron con una escritura pública 14607 de ese año, habiéndolos adquirido a la señora Sara Piña Terriquez, comentó Axayacatl Medina, hijo de Eladio Medina, a ZETA.
El conflicto, propició dos procedimientos judiciales. Por parte de los quejosos (familia Medina), se dio inicio a un juicio reivindicatorio de dichos lotes, sobre los cuales la familia Castellanos Barone ya había comenzado la construcción de 5 casas. Con este juicio se pretendió nulificar las escrituras “aparentemente legales” de los Castellanos, quienes “por su cercanía a los gobiernos panistas pudieron cambiar claves catastrales y manipular y modificar expedientes en Catastro y en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio (RPPC)”, afirman los quejosos.
Paralelo a esto, los Castellanos presentaron una denuncia contra Axayacatl Medina por el delito de despojo, por lo que se ejerció acción penal en su contra, siendo detenido mientras limpiaba los lotes.
Los Medina afirman que los documentos y planos de catastro presentados por los Castellanos en ambos expedientes no corresponden a los lotes 27, 28 y 29 del Fraccionamiento Monte Bello, pero que no han encontrado perito que se atreva a declarar que éstos sí coinciden con los documentos de los Medina.
Al final, los Medina recibieron una sentencia desfavorable en el procedimiento civil, mientras que el penal culminó con una sentencia absolutoria y la orden para los Castellanos de restituir a Medina en la posesión del terreno, lo que no ha se podido ejecutar debido a la presencia de terceros interesados, quienes compraron las casas construidas, por lo que existen un par de sentencias, una civil y la otra penal que se contradicen.
La señora Cecilia Barone, esposa de Héctor Castellanos, afirma que si bien Medina adquirió un par de predios en 1980, esto lo realizó sin que existiera una autorización para fraccionar en el área, por lo que los predios no estaban delimitados de manera precisa.
En el procedimiento civil iniciado por Medina, se resolvió a favor de la familia Castellanos por no ser suficientes los documentos presentados para “acreditar que exista identidad entre el bien propiedad del actor y el que posee el pasivo procesal…no estableció un punto de liga a efecto de estar en posibilidad de ubicar el bien en comento”.
La esposa de Castellanos señala que de manera indebida, el Doctor Medina habría llegado a un arreglo con Catastro Municipal para que los predios que adquirió en 1980 se sobrepusieran sobre los adquiridos por ellos.
A pesar de esta sentencia no favorable a sus pretensiones, Barone comenta que Axayacatl Medina sigue empeñado en obtener la posesión de los predios, presentándose incluso con los actuales dueños de los predios para amenazarlos con el desalojo.