¿Quién tiene la razón?
Por un lado, integrado por la enorme mayoría de mexicanos está el grupo que coincide con la postura del gobierno federal. Y en el otro los que apoyan a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). El tema, ya lo sabe usted, es la Reforma Educativa. No hay cosa más terrible para una nación, que sus ciudadanos estén divididos y como consecuencia los resultados sean el caos, las agresiones, pérdidas económicas y daños irreparables a la propiedad privada y pública.
Es más que sorprendente saber de personas amigas que defienden a “los pobres maestros que son tan agredidos por Peña”. Y en la misma cubeta, introducen todos los males que nuestro país ha sufrido en los últimos años, especialmente a los 43 desaparecidos y a estas alturas, seguramente muertos. Incluso convalidan las tomas de carreteras, de lugares públicos, destrucción de propiedades privadas, porque “no les dejan alternativa”.
Sobre la Reforma Educativa que ya está convalidada por el Congreso y es Ley que debe cumplirse, aunque se admite puede ser reformada, lo que más escozor causa es “la pérdida de los derechos laborales”, sin que sea todo lo que le molesta a la CNTE. Sin necesidad de encuestas se puede asegurar que los mexicanos que apoyan la Reforma, son infinitamente más que los que la rechazan. Y mucho se debe a la agresividad de los maestros y el daño que están haciendo a la niñez.
Lo inexplicable es que en tantos meses no haya sido posible entablar una conversación seria, especialmente hay que decirlo, por la posición inflexible de los maestros que han demostrado un día sí y otro también que 1) No les importa la educación de los niños. 2) Tienen la seguridad de que su postura es la única razonable. 3) Están en una lucha de “todo se vale”, incluyendo agredir, lastimar, atropellar los derechos ciudadanos. Y en esas condiciones todos perdemos.
Nota 1.- En días pasados, tuvimos oportunidad de platicar con Juan, que se hacía acompañar de su esposa y dos chiquillos menores de 10 años, sus hijos. En Oaxaca, ciudad capital, tenía un puesto de alimentos. Durante más de 5 años ganaba lo suficiente para sostener a su familia. Pero desde hace un año empezó a sufrir los plantones de los maestros. Llegó a Tijuana con lo indispensable para pasar una semana. Busca trabajo, ayuda y algunos paisanos ya le han tendido la mano. Y así como él, muchos están viendo desaparecer su humilde patrimonio.
Nota 2.- Lo decidió el Presidente Enrique Peña Nieto: “Alfredo Castillo se queda”, porque es lo máximo. Los diputados calladitos… y tan bravos que parecían.
Nota 3.- Juan Gabriel vivió en Tijuana, estuvo integrado al Coro Polifónico de Catedral y reconoció siempre el apoyo que en esta ciudad recibió de gente buena. Del extraordinario compositor recordamos su educación y respeto para tratar a todas las personas. Q.E.P.D.
Luz Elena Picos es Directora de Red Social de Tijuana. Correo electrónico: redsocialtijuana@hotmail.com www.lagacetaredsocial.com