Oasis de ternura
en crisis y desesperación,
venero de amor de los desamparados,
peregrina incansable de la fe.
Pedazo de cielo y luna,
sol resplandeciente,
ungüento de las heridas,
agua mansa y dulce,
paraíso, edén del amor.
Diminuto paso, larga caminata,
selva virgen, avecilla silvestre,
gacela tímida llena de candor,
sábana blanca, mujer de valor.
Hoy el calendario, ochenta años,
te marca te de Teresa,
te de Tijuana, te de querer,
Madre Teresa de Calcuta,
Hoy en tu día tu nombre ha
quedado en la eternidad.
José Palma Herrera
Tijuana, B.C.
