El video que se difundió el pasado viernes, en el que presuntamente aparecía el sacerdote Janamuato, José Alfredo López Guillén, ingresando a un hotel con un menor el día de su secuestro, era falso y fue difundido por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán (PGJE), asegura el diario Reforma en su columna ‘Templo Mayor’.
“Si tiene planeado ser víctima de la delincuencia, más vale que no sea en el Michoacán de Silvano Aureoles porque, ahí, además, lo difaman. Cosa de ver que en cuanto se denunció la desaparición del párroco de el gobierno perredista se apresuró no a resolver el caso, sino a descalificar a la propia víctima”, señala el rotativo de circulación nacional.
La grabación de las cámaras de seguridad de la hospedería, en la supuestamente aparecía el párroco en compañía de un menor, entrando a un hotel, en realidad, era otra un civil divorciado que iba con su hijo, a quien fue a visitar al municipio de Puruándiro.
El propio gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, informó que el cura se encontraba con un joven de aproximadamente de 16 años de edad, al momento de ser plagiado.
En entrevista radiofónica el mandatario señaló: “Tengo información acerca de que el cura referido desapareció el lunes pasado. Finalmente, ayer en el transcurso del día se hizo la denuncia correspondiente […] ya se investiga el caso y al parecer se tendrán resultados pronto”.
Por su parte, el Cardenal Alberto Suárez Inda criticó la difusión del video. En un mensaje a medios, el prelado comentó que las “interpretaciones maliciosas hicieron más doloroso” para la Iglesia la desaparición del sacerdote.
Sin embargo, el también Arzobispo de Morelia, evitó criticar la actuación de la Procuraduría michoacana, la cual avaló originalmente el citado video como una evidencia del caso, y aseguró tener testimonios del personal del hotel que identificaban al sacerdote en la grabación.
La Arquidiócesis de Morelia consideró el robo como posible causa del asesinato de párroco de Janamuato, José Alfredo López Guillén, hallado la noche del viernes asesinado a balazos.
En un pronunciamiento que leyó, el Cardenal recordó que el sacerdote fue sacado de la Casa Parroquial el pasado 19 de septiembre: “Hasta ahora lo que sabemos es que el padre fue asesinado pocas horas después de que lo secuestraron y su cuerpo fue abandonado a unos kilómetros, llevándose su automóvil y también una camioneta de la parroquia y algunos otros objetos de valor”.
Suárez Inda lamentó que la violencia en el País haya dejado tres sacerdotes asesinados en las últimas semanas, luego del homicidio de otros dos curas en Veracruz, secuestrados en la iglesia de Nuestra Señora de Fátima, ubicada en Poza Rica, y localizados sin vida horas después en un paraje del municipio de Papantla.