Jaime Bonilla no aceptó el pago de 11 millones anunciado por el alcalde Jorge Astiazarán, por lo que al pleito legal entre el dirigente de Morena y el Ayuntamiento de Tijuana se añadió esta semana una denuncia por incumplimiento y violación a una suspensión judicial ante el juez de Distrito, interpuesta directamente contra el presidente municipal y el tesorero municipal José Manuel Noriega.
Jorge Astiazarán anunció el martes 23 de agosto la subasta de predios municipales para “cumplir con compromisos”, entre ellos enumeró el pago de una condena por la demanda interpuesta por Jaime Bonilla, para lo cual se dispondrían 11 millones de pesos de los 200 millones que se prevé obtener como mínimo una vez efectuadas las almonedas, proceso que se desarrollará durante septiembre.
Pero la cantidad señalada por Astiazarán no cubre la cantidad que el Ayuntamiento de Tijuana fue sentenciado a pagar, la cual oscila en los 59 millones de pesos.
Tan solo en la reparación del daño original a las instalaciones de su empresa Media Sports de México, S.A. de C.V., propiedad de Jaime Bonilla, se estableció un monto de 630 mil dólares, pero el ex diputado federal exige también la cobertura de intereses y costo del proceso judicial iniciado en marzo del 2007, para un total de 59 millones de pesos.
El Juzgado Quinto de lo Civil dictó sentencia definitiva favorable para Media Sports de México, condenando al Ayuntamiento de Tijuana al pago de la cantidad demandada y las indemnizaciones correspondientes, con todo y los intereses generados cada día, un promedio de 23 mil dólares al mes. No obstante el gobierno municipal no ha cumplido con el pago.
Al gobierno de Jorge Astiazarán se le requirió un informe de los ingresos disponibles, presentando el tesorero municipal, José Manuel Noriega, datos que establecen que hasta abril de 2016 el municipio contaba con ingresos sin etiquetar del orden de los mil 601 millones 735 mil pesos, lo que el juez federal consideró suficiente para el cumplimiento de la sentencia.
Pero el gobierno de Astiazarán no pagó ni respondió a la sentencia, omisión que llevó a los apoderados legales de Jaime Bonilla a interponer una denuncia directa contra Jorge Astiazarán y el tesorero José Manuel Noriega, lo que ahora hace considerar al alcalde que “si no nos queda de otra vamos a tener que pagar”.
Y advirtió: “Nosotros seguiremos utilizando todos los medios legales para defendernos, no solo para defender al Ayuntamiento de Tijuana, sino para defender a los tijuanenses”.
Pero ante la falta de recursos optó por dejar la resolución final no a los tribunales, sino “que se lo dejo a la conciencia del señor Bonilla, que es un líder de un partido político”.