Desde octubre de 2012, Mercedes Alarcón Barraza era amenazada constantemente por su esposo Luis Enrique Huidobro Díaz tras la solicitud de un divorcio voluntario. Sostuvieron una relación por 10 años, pero su pareja se jactaba de poder al desempeñarse como perito médico legista adscrito al Tribunal Superior de Justicia, además de ser catedrático en dos universidades.
Las humillaciones para ella y sus dos hijos eran constantes. Cansada de la violencia familiar y el abuso, la mujer interpuso una denuncia ante el Ministerio Público. El hombre no se quedó atrás e hizo lo propio ante las autoridades jactándose de ser “víctima de violencia”. Pero solo a ella le fueron fincados antecedentes penales. “Él utilizó influencias para limpiar su nombre”, aseguraría la mujer.
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Para sacar adelante a sus dos pequeños, Mercedes comenzó a trabajar con infinidad de dificultades por tener antecedentes. Muchas puertas se le han cerrado. Sin embargo, su ex pareja en el Tribunal Superior de Justicia sigue ascendiendo de nivel, pese a estar enjuiciado y tener abierta la causa penal 627/2013 por violencia familiar y lesiones.
A Huidobro Díaz, hace unos días le fue tomada protesta como nuevo coordinador del Servicio Médico Forense en Tecate, sitio en donde ya despachaba desde hace un mes; mientras que Mercedes lucha para que le liquiden cerca de 17 mil pesos que le adeuda un centro educativo de gobierno en donde se desempeñó como catedrática durante un semestre, pero que su pago está detenido “por tener antecedentes penales”. No se vale.
