Empleados de la dependencia llevan a cabo supervisiones irregulares y fincan adeudos, sin siquiera enterar personalmente a sus clientes. La dependencia argumenta que todo lo hecho está bajo regla
Derivado de visitas de verificación de parte de la Comisión Federal de Electricidad y fechados en junio y julio de 2016 algunos usuarios del servicio en Tijuana recibieron en sus casas un oficio donde les cobran consumos no registrados, lo anterior derivado de supuestas alteraciones en los medidores.
Los cobros de la dependencia van desde los 100 mil pesos hasta el millón de pesos y de no ser cubiertos en 72 horas los ciudadanos se hacen acreedores a la suspensión del servicio.
De acuerdo a la especialista en derecho fiscal y asociada de la firma CIG Consultores, Paola Vázquez, tiene registrados por lo menos ocho casos, pero podrían ser más en el estado, ya que la comisión hace dichas revisiones en toda la región y donde los consumidores se han visto afectados con el suministro de energía.
“Tenemos los elementos para interponer una demanda de amparo en contra de dichos actos, ya que los procedimientos se realizaron sin cumplir con las garantías constitucionales en materia de fundamentación y motivación, y sin cumplir con los requisitos de legalidad que establece la Ley de la Industria Eléctrica”.
“La irregularidad se da en el momento en que llega el empleado, supervisa instalación y levantan una notificación derivada de la revisión donde se presume una irregularidad, luego establecen que la persona no paga la luz que le corresponde, por lo que le determinan los montos desde 10 años atrás a la fecha, según lo marcan los estatutos de la CFE, pero no le notifican personalmente”, dijo en entrevista con ZETA.
Destacó que las violaciones de CFE llegan al extremo que han emitido oficios donde atemorizan a los usuarios para que paguen los supuestos adeudos, de no hacerlo le suspenden el suministro además de llevar a cabo acciones civiles y penales en contra del ciudadano.
Afirmó que ha habido casos donde los usuarios han llegado a su domicilio y no tienen servicio. Con lo que no se tiene la certeza jurídica de la revisión sin estar presente el involucrado: a partir del artículo 107 del Reglamento de la Industria Eléctrica, establece que debe haber dos testigos, la persona debe recibir el oficio para firmarlo.
A las inconsistencias se suman el que los folios de los documentos no concuerdan, el nombre del notificador está cambiado o ni siquiera aparece el nombre del departamento que emite el oficio.
“Fui a la CFE, estos casos los atiende Abraham Reyes, pero no estaba. Me atendió un abogado que le ayuda. Le expliqué los casos, pero no quieren conciliar. Ya al salir de las oficinas se me acercó un empleado quien reconoció que el procedimiento estaba mal pero que aun así las personas tenían que pagar¨, acotó.
Agregó que la CFE agrega en el documento información sobre un convenio celebrado con el Sistema de Administración Tributaria (SAT), por el cual se le requerirán contribuciones omitidas del Impuesto al Valor Agregado (“IVA”), todo lo anterior sin un solo fundamento legal, lo que resulta en una grave afectación en la esfera jurídica del particular. Además de que en las oficinas le entregando al usuario una hoja para que vayan a solicitar un préstamo a Santander para saldar su deuda.
CFE todo en base a la Ley
El superintendente de zona Tijuana de la CFE, Luis Enrique Torres Inzunza, arguye la Ley contempla que por lo menos una vez cada tres años se lleve a cabo la supervisión de medidores. En lo que va del año se han revisado 57 mil 36 revisiones, de esa cifra entre el 5 y 8 por ciento presenten robo de energía. Faltan por revisar 44 mil 981 aparatos.
Agregó que el procedimiento se hace en base a lo que contempla la Ley. El empleado debe identificarse e informar al ciudadano el propósito de la visita. En caso de demostrarse que existe robo de energía se deja la hoja de inspección y debe ir firmada por el usuario, aunque en muchos casos no quieren signarla y no se les puede obligar, sin embargo afirmó que tienen testigos y la evidencia del ilícito.
“Esto es solo para quienes roban la luz porque se trata de un delito federal. Si se niega a pagar entonces interponemos denuncia ante PGR y el departamento jurídico procede a recuperar el deudo. No es un oficio de amedrentamiento sino de solicitud de pago por un adeudo”, comentó.
Respecto al cobro del IVA, agregó que del total de la factura 16 por ciento corresponde al SAT, por lo que a ellos les toca reportarlo a la dependencia y si existe el hurto entonces también se tiene una evasión fiscal.
Quejas contra la comisión
Según los registros de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) de enero a junio de 2016 a nivel nacional se recibieron 11 mil 850 quejas contra la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
En Tijuana la dependencia ha instalado un módulo para atender las quejas de cobros excesivos. Al momento de recibir la atención se verifica el historial de consumo para ver si hay discrepancia, después se fija una fecha para la revisión de las instalaciones, es decir que no exista un “diablito”, en caso de haber un cobro indebido se pide la corrección.