Denuncian trato de esclavos
A partir de las 5 de la mañana de este lunes 29 de agosto, entre 40 y 60 trabajadores de la empresa Berrymex y Driscoll`s, en el Valle de San Quintin, iniciaron un paro de labores “porque todo sigue igual”.
Con pancartas y consignas como “Driscoll’s no quiere trabajadores, busca esclavos”, operadores de máquinas de esa empresa se apostaron afuera de sus instalaciones con prácticamente las mismas exigencias que detonó la rebelión de jornaleros hace un año y medio.
Amenazaron los trabajadores que no reanudarán labores hasta no obtener un salario de 300 pesos al día, equipo y medidas de seguridad para manejar pesticidas, reconocimiento del Sindicato de Jornaleros (SINDJA), y desconocimiento al de la CROM (Confederación Regional Obrera Mexicana).
Igualmente exigen la reinstalación de siete trabajadores despedidos y la destitución del supervisor Oscar Mayren. Se quejaron que desde hace una semana están implorando a la empresa y ésta los ignora, igual que la Secretaría del Trabajo del gobierno estatal que “siempre nos ha dado la espalda”, denunció el operador Joel Santiago.
“Responsabilizamos al gobernador Kiko Vega de cualquier represalia en contra de los trabajadores del campo”, advirtió el joven jornalero Lorenzo Rodríguez, miembro de la Alianza de Organizaciones y secretario general del SINDJA.