Bastian Schweinsteiger, el número “7”, el capitán y eterno medio de contención alemán, decidió retirarse de su selección nacional en partido amistoso contra Finlandia, que ganaron 2 por 0. A sus 32 años, cede su lugar a la nueva generación que viene empujando fuerte, como los hermanos Bender o la promesa Serge Gnabry.
Bastian como seleccionado jugó 121 partidos durante 12 años (2004-2016), donde participó en tres Copas del Mundo y cuatro Eurocopas.
En el mundial de Brasil 2014 se consagró campeón del mundo tras vencer 1-0 a los argentinos en tiempos extras con gol de Mario Götze, dándoles el cuarto campeonato mundial a los teutones. En la Eurocopa Austria y Suiza de 2008 se quedó con el subcampeonato tras caer 1-0 ante la Selección de España de Luis Aragonés.
Los seleccionadores Jürgen Klinsmann y Joachim Löw, convocaban al mediocampista por su fino estilo de juego desplegado en el Bayern Múnich (2003-2015), donde consiguió ocho títulos de liga, siete Copas (DFB-Pokal) y dos Supercopas de Alemania. También obtuvo la UEFA Champions League en Wembley, Inglaterra en el 2013 contra el Borussia Dortmund. “Basti” como jugador será recordado al nivel de “El káiser” Franz Beckenbauer, “El bombardero” Gerd Müller o “El Terminator” Lothar Matthäus. Como persona quién no recuerda el consuelo que les dio a Lionel Messi, Cristiano Ronaldo, David Luiz y Karim Benzema en el mundial de Brasil 2014, solo por mencionar algunos casos, por ese motivo es tan relevante su partida de la selección alemana. (Ricardo I. Méndez Pérez)
