Donde sigue el pleito intestino es en las filas del PRD. A dos meses del proceso electoral siguen reluciendo los trapos sucios. La tarde del pasado 13 de agosto, un numeroso grupo de personas acudió a las instalaciones del Comité Estatal del partido del Sol Azteca para reclamar la falta de pago prometido en la campaña 2016. Se trata de gente muy humilde, sobre todo residentes de la Zona Poniente de Mexicali, al parecer relacionada con el Distrito 06.
Se calcula que fueron cerca de 110 personas entre brigadistas y representantes de casillas a quienes les habían prometido una cantidad de dinero por su participación electoral, primero en campañas y luego el domingo 5 de junio. De acuerdo con una de las versiones, a un numeroso grupo de ellos los invitaron a participar como funcionarios de casilla pero de última hora les avisaron que no pudieron registrarlos “por fallas en el sistema de cómputo”. Aun así les prometieron un pago por acudir a votar y llevar al menos a otras cinco personas, lo cual hicieron. A los brigadistas les ofrecieron 8 mil pesos, a los funcionarios de casilla 500 pesos, y a los votantes una despensa para cada uno. De estos últimos calculan hubo cerca de 300, según ha expuesto una lideresa de la Zona Poniente, de la colonia Santa Bárbara.
El problema surgió a la hora de pago, ya que no les cumplieron lo prometido. Calculan que en total le adeudan cerca de 140 mil pesos a ese grupo -la mayoría mujeres- del sector popular del Partido de la Revolución Democrática.
La tarde del sábado acordaron presentarse en la Secretaría del Trabajo, donde fueron atendidos, pero en la primera cita no se avanzó en el trámite y tuvieron que regresar a otra audiencia de conciliación donde se presentó la encargada de finanzas del Comité Estatal, a quien solo conocen como María del Refugio -“La Cuca”-, la cual argumentó en su defensa que “no los conocía”, por lo que a la fecha nada se ha resuelto.
El incidente es ilustrativo de lo que está sucediendo en las filas del PRD, por ese y otros casos se explica el evidente fracaso electoral que tuvo el que inició como un partido de izquierda y que en el pasado proceso electoral -desde el arranque- expuso la polarización interna, ya que desde el momento del registro de candidatos, se suscitó un zipizape entre dos fracciones que -cada una por su lado- traía la lista de candidatos.
Habría que investigar el tema financiero, pues hay quienes aseguran que ese adeudo no es el único y que hay otros militantes a quienes también les adeudan por diversas asignaciones y que a la fecha, no se sabe que pasó con esos pagos.
Eso es por un lado, por otro, el criticable clientelismo que se ha criticado en otras fuerzas políticas donde el lugar de la conciencia política y social, lo ocupa un billete de 500 pesos.
Decisiones
Dentro de cinco semanas deberá asumir la XXII Legislatura y hasta el momento el Partido Acción Nacional no ha definido quién será el coordinador de la bancada mayoritaria, en este caso la blanquiazul. Se adelanta que tendrán al menos 13 escaños que llegaron postulados por el PAN -aunque al
menos tres no son militantes-, por lo que el número de la bancada directa presumiblemente se reduce. En cuanto al posible coordinador parece que actualmente los momios van a favor del ex diputado federal y ex líder estatal de Acción Nacional, Andrés de la Rosa, y que en el sprint final quedarían relegados Carlos Torres y Sergio Tolento, por la que la decisión que tome el Comité Estatal tendría que ser anunciada a finales de este mes.
Formalmente corresponde a José Luis Ovando, el actual dirigente en Baja California, definir esa posición -los malpensados aseguran que es el gobernador quien selecciona- y las fechas también marcan que ésta podría ser una de la últimas decisiones del propio Ovando, ya que su periodo al frente del partido en el poder -estatalmente hablando- parece culminar en octubre. Aunque no descartan que repita en el cargo por tres años, sobre todo porque nacionalmente hay temas pendientes que los azules pretenden aterrizar, además, eso implicaría que el actual dirigente estuviera al frente en la peleada elección federal de 2018 -en la cual se elegirá Presidente de la República- y de paso la de 2019, cuando termine el mandato de Kiko Vega.
A la espera
Y dado que el panorama postelectoral -en términos de resultados- no ha variado mucho hasta el momento y las impugnaciones en la mayoría de los casos poco efecto han tenido, se advierte que la composición de los diputados que lleguen por la vía de representación proporcional sigue en la misma
ruta: dos para el PRI, otros dos para MORENA y uno para cada uno del PES, Movimiento Ciudadano, PBC y PRD, para completar los ocho espacios que van por este principio; es decir, para los que no ganan en las urnas, pero esas fuerzas políticas quedan representadas en la Legislatura.
Eso implica que por el tricolor lleguen Salvador Sánchez, líder juvenil del PRI en Rosarito y Marco Antonio Corona, ex delegado de SEDESOL. También van Job Montoya por MC, Luis Moreno por el PES, Jorge Núñez por el PEBC, Rocío Gorosave por el PRD y completan dos por MORENA: Víctor Morán -abogado tijuanense- y Catalino Zavala, quien rompería su propio récord -no solo por el número- al llegar por cuarta vez a la Legislatura postulado por cuatro partidos diferentes: PARM en 1989, PRD en el 95, PRI en 2004 y ahora en 2016, con MORENA.