El escritor presentó el espectáculo “Mientras nos dure el veinte” en el Centro Cultural Tijuana (CECUT), mismo que llevará a Pachuca, Ciudad de México, Mérida, Monterrey y Monclova. También promueve el libro “La alternativa”, de Luis Villoro Toranzo
Al cumplir 60 años, Juan Villoro tiene una agenda que va desde las lecturas en voz alta con el espectáculo “Mientras nos dure el veinte”, hasta las diversas presentaciones tanto de sus propias reediciones como de “La alternativa. Perspectivas y posibilidades de cambio”, libro póstumo de su padre, el filósofo Luis Villoro Toranzo.
“Hasta ahorita he tratado de no enterarme mucho de ese aniversario y quizás este proyecto, ‘Mientras nos dure el veinte’, también forma parte de sacudirme la polilla, ¿no? A la vejez, viruela”, refirió Juan Villoro a ZETA.
Y a propósito de las presentaciones al lado de Alfonso André (batería), Diego Herrera (teclado) y Federico Fong (bajo) de Caifanes; y Javier Calderón (guitarra) con el espectáculo “Mientras nos dure el veinte”, tanto el 9 de junio en Tepic como el 26 de junio en Tijuana, Villoro confirmó a este Semanario algunas presentaciones que ocurrirán en los próximos meses:
Basado en las crónicas de su libro “Tiempo transcurrido” (Fondo de Cultura Económica, 1986; reedición 2015), el espectáculo “Mientras nos dure el veinte” se presentará el 18 de julio de 2016 en Pachuca, Hidalgo.
Asimismo, el 13 y 14 de agosto el turno es para el Museo del Chopo de la Ciudad de México, tal como sucedió el 4 y 5 de diciembre de 2014, donde por cierto, fue grabado el disco “Mientras nos dure el veinte”; también en la Ciudad de México está confirmada la presentación del acontecimiento literario y roquero para el 31 de agosto en El Colegio de México.
La gira continuará el 2 de octubre en Mérida, Yucatán; y en esa misma semana de octubre de 2016, en fechas por confirmar, el espectáculo de rock y lectura en voz alta sucederá en Monclova y Monterrey.
Para mayores detalles de la agenda, los lectores y fans de “Mientras nos dure el veinte” también pueden consultar https://www.facebook.com/mientrasnosdureelveinte
Las reediciones
Con la publicación de “La cuchara sabrosa del profesor Zíper” (FCE, 2015), Juan Villoro inició una serie de ediciones y reediciones en torno a la saga protagonizada por el “Profesor Zíper”.
Cabe recordar que “La cuchara sabrosa del profesor Zíper” es la tercera parte de la trilogía iniciada con “El profesor Zíper y la fabulosa guitarra eléctrica” (Alfaguara, 1992) y “El té de tornillo del profesor Zíper” (Alfaguara, 2010).
“Salió primero ‘La cuchara sabrosa del profesor Zíper’ (FCE, 2015), que es una nueva aventura que editó el Fondo; y ahora acaba de salir ‘El profesor Zíper y la fabulosa guitarra eléctrica’ (FCE, 2016) que había sido la primera aventura, y el próximo año sale ‘El té de tornillo del profesor Zíper’, esto ya va en marcha en el Fondo de Cultura Económica; ‘El Fisgón’ hizo nuevos dibujos para los libros que ya estaban editados, y por supuesto, también para ‘La cuchara sabrosa…’”, refirió a ZETA el autor.
Concluyó en cuanto a las reediciones de sus obras:
“Luego viene otro libro para niños que no es del ‘Profesor Zíper’, pero que más o menos es para las mismas edades y que también reeditará el Fondo de Cultura que es ‘Autopista Sanguijuela’. También el Fondo tiene ‘El libro salvaje’ (FCE, 2008), que no es propiamente para niños, sino ya para adolescentes”.
La propuesta del filósofo
Una de las lecturas que hay que considerar en estos tiempos aciagos de México es indiscutiblemente “La alternativa. Perspectivas y posibilidades de cambio”, obra póstuma del filósofo Luis Villoro Toranzo (Barcelona, 1922-Ciudad de México, 2014).
“La alternativa” consta de dos partes: en la primera parte, titulada “Perspectivas de cambio”, pueden leerse ensayos de Luis Villoro en torno a temas como “Revolución”, “Democracia”, “Pluralidad” y “Nuevo proyecto”.
Es en esta sección donde Luis Villoro propone “una revolución auténtica contra cualquier forma de dominación”:
“Todo ello implica transitar hacia otro tipo de Estado, un Estado que reconociera un pluralismo jurídico y social, con la existencia de los derechos no sólo individuales, sino también colectivos, los que podrían ejercer los pueblos indígenas del país. Éste sería el paso de la actual ‘partidocracia’, a una democracia auténtica”.
Luego, en la segunda parte, se incluye la relación epistolar entre el Subcomandante Marcos y Luis Villoro, sostenida entre 2011 y 2012.
Finalmente, en entrevista con ZETA, Juan Villoro valoró la obra póstuma de Luis Villoro como “un testamento”:
“Mi padre empezó su trayectoria como filósofo escribiendo un libro que se llama ‘Los grandes momentos del indigenismo en México’ (COLMEX, Primera Edición, 1950; reedición FCE, El Colegio de México, El Colegio de México, 2015). El levantamiento zapatista de 1994 fue una reeducación para él, y a mí me parece admirable cómo el arco de su vida comienza con el interés de los intérpretes de los indios y termina con el contacto directo con ellos; entonces ha sido una evolución muy significativa y su testamento es ‘La alternativa’, un libro escrito con la sencillez muy profunda del pensamiento indígena”, concluyó Juan Villoro.