Ayer 7 de julio, mientras salía de una reunión con el Colectivo Feminista Cihuatlahtolli A.C., el activista Jairo Guarneros Sosa, fue baleado a quemarropa en Orizaba, Veracruz.
A pesar de las varias detonaciones, un solo proyectil lo impactó en la clavícula, por lo que se encuentra hospitalizado y bajo custodia policial.
“Ya bájenle o va a haber más muertos”. es un extracto del audio de un video entregado por el Colectivo Cihuatlahtolli como prueba ante la Unidad Integral de Procuración de Justicia del XV Distrito Judicial, palabras dichas por un elemento de la Policía Municipal de Orizaba al activista durante una manifestación, un día antes del atentado.
Es por esta razón que activistas de Veracruz señalan como responsable al Presidente Municipal Juan Manuel Díez Francos y la corporación policiaca, contra la que Guarneros Sosa ha sido un crítico acérrimo, por los excesos en el uso de la fuerza contra la población civil.
“Exigimos garantías de seguridad para Jairo y su familia.
Responsabilizamos a Juan Manuel Díez Francos, así como al Gobierno estatal y federal de cualquier futuro atentado en contra de Jairo, sus familiares o integrantes del colectivo feminista, Cihuatlahtolli, GRITO y los demás grupos que han sido compañeros de lucha” manifestaron compañeros del agredido.
Guarneros Sosa es dirigente del Grupo Independiente de Taxistas de Orizaba (Grito) e integrante de ed Mexicana de Trabajo Sexual y del Grupo Multi sectorial VIH/SIDA.
