La brigada del Área de Verificación de Combustibles de oficinas centrales de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) llevó a cabo diversos operativos sorpresa en todo el país, detectando 15 estaciones de combustible en México y al menos una en Baja California Sur que se ha negado en varias ocasiones a ser verificada. Por ello, la institución ha determinado que las estaciones entraron a un proceso administrativo, en el cual podrían perder la franquicia.
“Baja California Sur también se encontró con estaciones de combustible que se niegan a ser verificados cuando llegan las brigadas de manera sorpresiva. Arrojando en estas verificaciones que hay estaciones de combustible que se negaron, y las que repiten en volverse a negar, es cuando la Ley te dice que después de tres verificaciones y tres negaciones, la Ley te permite, como institución PROFECO, solicitarle a la franquicia de PEMEX la cancelación”, expresó Isaías González Nava, delegado estatal de la PROFECO.
La dependencia federal dio a conocer que en los últimos meses, 15 estaciones de combustible se han negado a ser verificadas, las cuales están distribuidas en Chiapas, Jalisco, Tamaulipas, Sinaloa, Nuevo León y Baja California Sur. En Tijuana, Baja California, la estación Productos Petrolíferos de Tijuana, S.A. de C.V. perdió su franquicia por negarse a ser verificada en reiteradas ocasiones.
En Baja California Sur, 24 estaciones de servicio de combustible que se han negado a ser verificadas desde 2014: Servicio Pescadero, Hidrofuel, Estación de Servicio Costa Baja, Servicio Regidores, Estación de Servicio Talpita, Servicio Forjadores, Autoservicio San Antonio, Servicio Mezquitito (La Paz); Neptune Fuels Aeropuerto, Playita, Zacatal, Servicio Lagunitas, Cabo Fuel Mesa Colorado, Servicio Venados, Servicio Aguajitos, Autoservicio Bienestar y Petróleos y Combustibles del Cabo (Los Cabos); Servicio Santo Domingo, Servicio Truck Stop Constitución y Combustibles y Lubricantes Insurgentes (Comondú); Servicio Loreto y Nopolo (Loreto); además de Servicio Santa Rosalía y Cañedo Castro Reyna Alicia (Mulegé).
Según las autoridades, pudiera darse el caso de que existan estaciones de servicio patito, que no cumplen con la documentación requerida o carecen de ésta para estar debidamente constituidas.
“Suponemos que están haciendo mal uso de olas estaciones de combustible, sería el motivo principal fundamentado de que una empresa se niegue a ser supervisado por una autoridad, es que están mal en la documentación, en la franquicia, en la expedición de litros de a litro; puede ser que estén mal en lo que es comportamiento comercial”, refirió el funcionario de la PROFECO.
Agregó que al negarse a una verificación, las estaciones son acreedoras a una sanción económica, sin embargo, al permitir el acceso a las autoridades la sanción es menor y ésta les ayuda a solventar los problemas, ya que pudiera tratarse de calibración u otros documentos en los cuales se puede gestionar a través de la Procuraduría.
“Lo ideal para cualquier empresa es que no tenga nada que esconder, déjense verificar, tienen también su procedimiento para que lo puedan corregir, ya que si siguen con esas actuaciones de negarse rotundamente a ser supervisados, van a terminar sancionados. Y son multas que rondan en los 250 mil pesos, una negativa de verificación”, advirtió González Nava.
En Baja California Sur hay un número importante de estaciones que se han negado a las verificaciones de la PROFECO, sólo una está en riesgo de perder la franquicia por negarse en repetidas ocasiones al proceso que se sigue por la dependencia. De ahí la invitación a los ciudadanos a denunciar cualquier inconformidad que se presente en cualquier estación de servicio.
