Consultoría Matrimonial y Familiar
Desde muy joven me llamaba la atención este dicho, sin entenderlo; con el tiempo me he dado cuenta de que se tergiversó. Todavía en algunos artículos al respecto se considera vigente al mencionarlo, por lo cual se supone que una puta cobra por darle las mayores satisfacciones a los hombres haciendo lo que ellos quieran y como quieran, pero si se dice también que la esposa es ante todo casta y pura y que lo que pueda saber de sexo su marido se lo enseñará, no podrá aceptar ese comportamiento de ellas ni que se aloquen aun cuando así lo desearan, ni a ellas les agradaría que se les comparara en esa forma, aun cuando utilizar en algunas parejas esa forma de tratarse en la cama aumenta el libido de ambos y su satisfacción es mayor. Es cuestión de cada pareja como mejor se desenvuelvan y logren sentirse bien.
En la medida en que la pareja se vaya conociendo e identificado y traten abiertamente su relación y quieran experimentar nuevas y atrevidas cosas en esa medida su relación íntima se irá fortaleciendo y disfrutando, pero que la mujer le diga a su marido que desea que lo hagan en una forma nueva, éste se pondrá alerta y en un momento de su machismo preguntará que cómo supo de eso, quién se lo dijo, cómo lo aprendió, y menos si ella toma en un momento dado la iniciativa cuando se supone que todo lo que sabe ella es porque su marido se lo enseñó y él inicia el rito del amor, mas sin embargo la mujer en su deseo de experimentar nuevas cosas de mayor disfrute pregunta a sus amigas, lee revistas donde se trata todo acerca del sexo, o simplemente temas como el empoderamiento de la mujer, mejorar su autoestima donde se dan consejo cómo hacer que su vida íntima o sexual se fortalezca y potencialice qué es lo que desean con sus maridos o parejas, entonces por qué los hombres se ponen en ese papel de quisquillosos, pues por machos inseguros.
El hombre por naturaleza es el que tiene el control total en la pareja y la familia y es cuando considera que él y solo él es el que le dirá a su mujer cómo habrán de tener sus relaciones íntimas y cualquier otra cosas que salga de su parámetro mental lo considerará como una afrenta, que afecta su orgullo porque se dará cuenta de que su mujer estará disfrutando mayormente, y que él no aguantará el ritmo. Aquí es cuando se demuestra que el sexo débil no son ellas. El hombre no logra ni quiere entender que la mujer está en igualdad de derechos para disfrutar el amor como ella lo quiera y desee y de no aceptarlo vendrán los conflictos que en algunos casos los lleve al divorcio.
Reaccionar como una puta no es con vulgaridades sino reaccionar con la mente abierta de poder disfrutar libremente su cuerpo, que se le aprecie y ame pero que no denostada por su pareja, al contrario, es admirarla, amarla y adorarla pero sobretodo respetarla.
Si el hombre desea que su mujer reaccione como una p… como dice el dicho, es cuestión de que él la motive haciéndole ver todo lo que pueden aprender y compartir juntos, con escarceos, juegos, risas y buena disposición aprendiendo, leyendo libros sobre sexualidad (Kamasutra por ejemplo), revistas donde se trata el tema por especialistas o buscando asesoría con gente especializada en esos temas como habemos algunos, pero como el tema es muy íntimo y solo en la pareja se trata y el hombre no desea que un desconocido les diga cómo hacer el amor con sus parejas, ya que si quieren que se comporten sin tanta santidad, pues deben de entender que en alguna forma lo deberán saber y conocer y no experimentando con p… Pero viéndola bien, este dicho poco a poco caerá en desuso, ya hay más conciencia en la pareja y si se ama pues que se acomoden como quieran y puedan.
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Roberto Bautista López, reside en Tijuana, B.C.