Los hobbies más absurdos de crueles tiranos
Stalin. Ver películas de Hollywood. Su favorita era “Boys town”.
Hitler. Leer las obras de Karl May, un escritor de novelas del Oeste.
Nicolae Ceaucescu. El dictador rumano era adicto a la cetrería (cazar con aves salvajes, principalmente halcones).
Idi Amin. Al sanguinario dictador de Uganda le fascinaban los dibujos animados. Sus preferidos eran los de Tom y Jerry.
King Jong II. El líder norcoreano colecciona pornografía.
Mobutu. El déspota zaireño era adicto a las compras.
Saparmurat Niyazov. El ex presidente de Turkmenistán atormentaba a su pueblo escribiendo poemas épicos.
Mussolini. Se dedicó a escribir un estudio de lo más aburrido sobre la literatura rusa.
Dietéticos
– Amor, ¿qué me pongo?
– Ponte a dieta
***
– ¡Oh Dios mío! Fui con el doctor y me ha dicho que peso lo mismo que una persona de dos metros.
– ¿De verdad? Y qué vas a hacer al respecto.
– Pues no sé como pero tengo que crecer urgentemente.
***
– ¿En qué piensas?
– En que la vida me ha dado tanto que me gustaría devolverle unos 20 kilos.
***
– Creo que estoy pasada de kilos.
– Pues a como yo te veo luces una figura porno.
– ¿Cómo que una figura porno?
– Por no hacer ejercicio, por no dejar de comer, por no cerrar el pico cuando debes…
***
– Cariño, ¿estoy gorda?
– ¿Cómo se te ocurre, mi Buda? ¡Perdón, mi vida!
***
Conversación entre amigas:
– ¡Estoy feliz!
– ¿Ah sí? ¿Y por qué?
– Porque saqué del clóset la ropa de hace 15 años, ya me probé una bufanda y me queda perfecta.
Autor: Marido flaco de Santa Fe… seguramente.
Cómo preparar una bomba en tres sencillos pasos:
Alcohol
Sinceridad
Autor: Fan de redes sociales.
Tipos de salarios en México
- Salario cebolla: Lo ves, lo agarras… ¡y te pones a llorar!
- Salario canalla: No te ayuda en nada, solo te hace sufrir, pero no podemos vivir sin él.
- Salario humor negro: ¡Te ríes por no llorar!
- Salario preservativo: Te corta la inspiración y te quita las ganas.
- Salario impotente: Cuando más lo necesitas te abandona.
- Salario dietético: Con él comes cada vez menos.
- Salario del ateo: Ya dudas de su existencia.
- Salario eyaculación precoz: Apenas ingresa… ya se acabó.
- Salario tormenta: No sabes cuándo va a venir, ni cuánto va a durar.
- Salario iceberg: Hace años que está congelado.
Autor: Cualquier empleado mexicano que no sea de gobierno.
