Sin realizar los peritajes solicitados por especialistas, el Ayuntamiento de Tijuana, contempla la posibilidad de permitir que la empresa Obras y Concesiones S.A. de C.V., mejor conocida como Makro, reconstruya la plancha de concreto que compone la plaza cívica de Palacio Municipal, clausurada indefinidamente por Protección Civil Municipal desde septiembre de 2014. Sin estos estudios, ningún proyecto de rehabilitación parcial es factible, señalan expertos.
Sus fallas estructurales no han sido corregidas, lo que la mantiene en desuso. Ya ni el “Grito de Independencia”, ceremonia que tradicionalmente ahí se realizaba, se ha podido celebrar en el lugar, al no estar en condiciones de soportar multitudes.
Recientemente, el Secretario de Desarrollo Urbano de Tijuana, Roberto Sánchez Martínez, señaló que la dependencia se encuentra analizando una propuesta presentada por Makro para rehacer el recubrimiento de la plancha, que por errores de planeación, pesa hasta mil kilos extras de lo debido, por cada metro cuadrado. El 2 de mayo, el Gobierno de Astiazarán sabrá si autorizará o no las obras, cuyo costo correría a cargo de la empresa, debido a la responsabilidad que todavía tiene.
Sánchez aseguró que el contrato firmado en 2010, contempla que la estructura de concreto sea segura para llevar a cabo eventos masivos, tal como ahora promete Makro; en caso de no ser así, la administración retirará la concesión otorgada por el Gobierno de Jorge Ramos. Los trabajos podrían durar hasta medio año, una vez celebrados los festejos de aniversario del Día de la Independencia.
Por su parte, Pablo Hernández Lee, ex presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Tijuana, dijo a ZETA que es necesario rediseñar –y reestructurar– la obra en su totalidad, pero antes deben hacerse los estudios y peritajes que el organismo solicitó al Ayuntamiento luego de una revisión ocular del sitio: exámenes de mecánica de suelo y un escudriñamiento del estado que guarda el concreto en diversos puntos de la infraestructura.
Pero los análisis reales no se han efectuado, por lo que Hernández Lee opinó que hasta el momento no es factible una reingeniería completa, menos aún la rehabilitación de una parte específica, como la plancha de concreto de la plaza cívica.
Asimismo, afirmó que hace meses, el Colegio presentó a Makro un presupuesto de los exámenes necesarios, así como un listado del personal especializado que cuenta con la capacidad de desarrollarlos, sin embargo, la compañía se negó a recibir asesoría.
“Todo está en manos del concesionario”, finalizó; según el ex representante de los ingenieros, el riesgo de que las obras comiencen sin un peritaje de por medio es que el lugar siga siendo inutilizable para la sociedad.