Conociendo de antemano la pretensión de transportistas y maestros de utilizar el tradicional desfile conmemorativo del Día del trabajo para verter su inconformidad contra el gobierno, la Confederación de Trabajadores de México, organización afín al priismo que organiza el mismo, sustituyó la marcha por un evento privado con los candidatos a munícipe y diputados locales del tricolor.
De manera que los tijuanenses presenciaron un desfile distinto a aquel al que están acostumbrados. Contingentes de maestros adscritos a las secciones 2 y 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) partieron desde la calle Decima, hacia la sede del Gobierno del Estado en Tijuana.
El reclamo de éstos era el pago oportuno a maestros interinos, la resolución de más de 3 mil solicitudes de jubilación y pensiones y la mejora a los servicios médicos y al suministro de medicamentos en ISSSTECALI, mismos que expresaban a través de consignas y pancartas, mientras una banda de guerra infantil abría la marcha.
Denunciando el atropello a sus derechos laborales, los más de 2 mil protestantes fueron colocándose al interior del estacionamiento del Centro de Gobierno, donde no hubo quien los recibiera y escuchara sus quejas.
Gustavo Martínez, coordinador de la sección 37 del SNTE en Tijuana, indicó, “realmente es lamentable que el patrón no tenga la cortesía de estar presente…pero la haya o no la haya tenía un compromiso, no vamos a renunciar a esta manifestación de exigir el respeto a nuestros derechos”, agregó.
“No es un gobierno con sensibilidad política ni social el que tenemos en Tijuana, que lo único que le interesa son sus negocios”, declaró Marco Antonio Pacheco, líder del Movimiento de Resistencia Estatal (MRE), quien se solidarizó con los trabajadores del volante, mas no con sus dirigentes.
Acusando el despojo de su patrimonio debido a lo que alegan es su no inclusión en el proyecto de la ruta troncal, cientos de taxis circularon justo detrás de los docentes, haciendo sonar sus cláxones al pasar frente a Palacio Municipal, el palco hacia Paseo Centenario vacío. Ni una autoridad municipal estuvo presente, hecho que contrastó con el primer año de gobierno de Jorge Astiazarán, en el que el alcalde encabezó el desfile del 1 de mayo.
Miguel Jiménez, Presidente de la Unión de Transportistas de Baja California, aseguró que fue el mismo gobierno municipal quien provocó los daños a la estación de la Ruta Troncal y dijo que el sector ha demostrado con hechos el estar a favor de la modernización, encabezando la marcha unidades de modelo reciente, la mayor parte de ellas de color blanco con dorado. De éstas, buena cantidad contaban con propaganda a favor de los candidatos del PAN y ni una sola de ellas por candidatos del PRI.
Aseguro que ya se han contratado abogados para interponer una denuncia contra el Presidente Municipal Jorge Astiazarán ante Banobras y el Banco Mundial, “por haber incrementado el parque vehicular mediante la venta irregular de 900 placas a la empresa Calfia, con beneficio por 225 millones de pesos”, acusó.
Alrededor de unas 50 unidades de la empresa de transporte masivo Azul y Blanco se unirían también a la marcha, liderados por su presidente Héctor Márquez, quien descartó actos de protesta como toma de vialidades o de las garitas de cruce internacional, “vamos a informar a la gente de que no estamos en contra de la modernización del transporte ni de la ruta troncal, pero sí de la corrupción”. Espera que para este viernes 6 de mayo los regidores den respuesta a su demanda de no incrementar el parque vehicular en el transporte público.
Gobierno PRInocho, corrupto y traidor, acusaron los transportistas a un ausente XXI Ayuntamiento, que no se encontró presente por no haber recibido ninguna clase de invitación, según se informó a ZETA.