Tras la detección de las malas condiciones en que se trasladaba a jornaleros agrícolas, principalmente en Comondú, en las llamadas páneles o transporte de personal, al no contar con asientos y utilizar baldes, además de que carecen de ventilación, en ese mismo operativo, en el mes de marzo se detectó a trabajadores que no estaban registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
La delegación federal del Trabajo informó que mantienen un operativo de inspección en los campos agrícolas en Comondú y Mulegé, municipios donde hay mayor presencia de estos centros de trabajo.
Confirmaron que las deficiencias en el trato a los jornaleros se siguen presentando, por ello ha llegado personal de oficinas centrales para apoyar en el operativo masivo en los campos de todo el Estado, y es que cada visita “volvemos a encontrar muchas deficiencias en la seguridad del trabajo, estamos hablando como cuestiones de la vivienda, estamos hablando, como cosa difícil, que no los inscriben en el régimen de seguro social, y también en este operativo va gente del IMSS y ahí mismo quedan inscritos; desde que nosotros los detectamos, ahí mismo quedan inscritos, no hemos detectado menores como lo hemos hecho en otras ocasiones”, señaló Ernesto Álvarez Gámez, delegado de la dependencia federal.
Asimismo, reconoció que las revisiones iniciaron desde la semana pasada y hasta que concluyan los operativos se darán a conocer las cifras oficiales que resulten de esta inspección. Adelantó que sí hay trato inhumano, pero lo que ya no se detectó es a menores de edad trabajando en los campos agrícolas, como en 2015, que encontraron niños trabajando en el rancho “El Piloto” de Mulegé.
“Nosotros agarramos este año un muestreo de gente que está en la zona de Comondú, estábamos por entrar a Vizcaíno cuando llegó una cuadrilla desde la Ciudad de México la semana pasada y toda la semana pasada ellos se fueron a trabajar a Vizcaíno, nosotros estamos apoyados por la Dirección de Inspección directamente de la Ciudad de México y mandó a un grupo de inspectores a revisar y certificar”, expuso.
De entrada, ya hay multas, algunas por situaciones menores, pero en conjunto generan ruido, pues aunque hay un avance, siguen las inconsistencias. Son temas que se tienen que corregir de inmediato debido a las violaciones a los derechos humanos de los jornaleros y por los derechos laborales que obliga a las empresas a brindar.
“A pesar de que nosotros aplicamos las multas menores porque encontramos muchas irregularidades, la cuantía se eleva, en este año sin darte números exactos, ya hemos aplicado multas que van de los 600 mil al millón de pesos. Desde 250 veces el salario mínimo a cinco mil, dependiendo del grado que exista en la sanción y el tipo de empresa”, comentó Álvarez Gámez.
Una de las medidas principales y que el Ayuntamiento de Comondú ha adoptado en esta lucha contra el maltrato a jornaleros agrícolas, son las condiciones del transporte de jornaleros, ya que anteriormente las unidades de transporte agrícola usaban baldes como asiento para trasladarlos de las comunidades a los campos, hoy la Dirección de Tránsito Municipal comundeña lleva a cabo inspecciones de las unidades para que cumplan con las condiciones mínimas salubres, de seguridad y comodidad para prestar el servicio; así lo manifestó Francisco Pelayo Covarrubias, Alcalde de Comondú.
“Ya le entramos al tema de la revisión y verificaciones de las unidades de transporte de los ranchos agrícolas a través de la Dirección de Transporte, ya que es necesario que nuestros jornaleros sean transportados con todas comodidades necesarias, también tiene conocimiento la Policía Federal”, finalizó.