A diferencia de los procesos electorales federales de 2012 y 2015 el ayuntamiento de Tijuana permitirá que se utilice el equipamiento público para que los partidos promocionen sus candidatos.
En este proceso electoral local de 2016 –donde se renovarán las cinco alcaldías y el Congreso de Baja California– será el gobierno municipal quien asigne y vigile la aplicación de los espacios.
En la administración de Carlos Bustamante Anchondo, no se acordó la utilización de sitios públicos de Tijuana con fines propagandísticos, el XXI Ayuntamiento, encabezado por Jorge Astiazarán Orcí, sí cedió con el Instituto Estatal Electoral de Baja California (IEEBC).
De eso se trató el “Convenio para la determinación de lugares de Uso Común del Municipio de Tijuana, Baja California”, y que fue firmado el 4 de marzo.
Entre los anexos se define que Tijuana tiene dispuestos 45 lugares en los que se permitirá que tanto los partidos como los candidatos independientes coloquen sus instrumentos de promoción del voto ciudadano, 43 de los cuales son lonas y 2 rotulados.
Eso sin contar que los candidatos podrán contratar –utilizando el financiamiento público– algún sitio privado para la colocación de la imagen de campaña que disponga.
Siete días después de la jornada electoral, el IEEBC está obligado –según estipula la sexta cláusula del convenio– a retirar la propaganda de esos 45 puntos, y en caso de no ser así, el Ayuntamiento, en base a su Reglamento de Limpia vigente, tiene la facultad de retirarla.
Como paréntesis: El equipamiento público son los espacios visibles que dispone un gobierno para promover servicios comunitarios, culturales, deportivos, de salud o de bienestar social, es decir que sean de apoyo para publicitar las acciones de gobierno. Pero en esta ocasión se ceden a la clase política.
En la cláusula quinta del citado Convenio, expone que si se colocan los señalamientos de campaña en un sitio no incluido en el acuerdo, serán catalogados como residuos por parte del Gobierno de la ciudad, y deberán ser removidos.
A decir de Javier Garay Sánchez, presidente del consejo del IEE esta regulación permitirá mitigar la “contaminación visual” que la publicidad política genera. No serán ni postes de luz, ni semáforos los que albergarán la imagen de los candidatos y/o los partidos en disputa, sino puentes peatonales y vehiculares que tengan un alto flujo de ciudadanos, así como dos bardas ubicadas en la Colonia Guerrero, las únicas incluidas en el Convenio.
Buscando que la distribución de los lugares entre los candidatos “sea pareja”, el organismo electoral del estado hará un sorteo de cada uno de los lugares, algunos de los cuales podrán ser subdivididos, es decir, algunas mamparas podrán tener hasta dos lonas –en el anverso y el reverso. El sorteo se realizará previo al inicio de las campañas electorales, una vez que la lista de candidatos sea oficializada.