Todo comienzo lleva un final,
el principio, con el Big Bang,
la Vía Láctea, el sistema solar,
¡la chispa!, biodiversidad.
En el comienzo solo era
una masa incandescente,
pero al enfriarse la tierra
el núcleo siguió caliente.
Primeros seres vivientes,
tan solo unicelulares,
al juntarse los nutrientes
surgen pluricelulares.
Plantas y animales fueron
progresando un poco lento,
aunque cada vez con más fuero,
¡transformándose violento!
Como todo evoluciona,
el tiempo no se detiene,
así la vida funciona,
imaginen lo que viene.
En la tierra de gigantes,
también seres mitológicos,
con plantas exuberantes
¡y los monstruos kilométricos!
Los cambios evolutivos
los generó un gran meteoro,
los dinosaurios furtivos
y gigantes come todo.
La gran extinción masiva
por la estrella de la muerte,
la vida no fue pasiva,
pues les cambiaba su suerte.
¡Borrados de la faz al instante!,
cientos de seres marinos,
otros monstruos estaban distantes
del gran impacto masivo.
La vida que estaba cerca,
quedó sembrada su esencia,
la onda expansiva se acerca,
¡dejando a su paso inercia!
Mientras el globo giraba
toneladas de tierra polvo,
del suelo se levantaba
¡precipitándose de pronto!
De nuevo sobre la faz
las criaturas asustadas,
en un tiempo no hubo paz,
¡perecieron aplastadas!
El polvo obscureció el planeta
y por meses las tinieblas,
las aves como cometas
chocaban por tanta niebla.
Se generó un maremoto
en la costa más cercana,
en los lugares remotos
la luz solar se bloqueaba.
Alados volaron lejos,
marinos también se fueron,
pero no se hicieron viejos
¡porque también fenecieron!
¡La tierra se estremecía!,
como un animal herido,
no sabían si amanecía,
¡todos vivían confundidos!
Escondidos en obscuras cuevas,
perdiéndose en laberintos,
tragando todo lo que se mueva,
¡otros chillaban agritos!
Cuando la selva exuberante,
expiraban por falta de luz,
los tiranos gobernantes
también morían por falta de plus.
Los carnívoros se alimentaban
de los dinosaurios yertos,
poco a poco todos expiraban
¡para asemejar desiertos!
No hubo más generaciones,
casi todos se extinguieron,
los gigantes, sus facciones,
fósiles nos advirtieron.
¡Por los cataclismos cíclicos!
se extinguieron generaciones,
nos lo explican los científicos
que estudiarán las reacciones.
Ahora nuestro planeta
quiere cobrar la factura,
haber sacado la veta
generará la fractura.
Nos estamos acabando el agua
y contaminamos la tierra,
grandes toneladas de basura,
¡señores!, estamos en guerra.
Después de millones de años
y de varios cataclismos
se empieza a sentir los daños
de los errores que hicimos.
Joel Vizcaíno Parra
Tijuana, B.C.
