Sobre las medidas tomadas por el Banco de México para estabilizar el tipo de cambio peso-dólar, el abogado fiscalista Adolfo Solís Farías declaró que de no funcionar, la divisa extranjera superará los 20 pesos por unidad.
Del ajuste a la tasa de interés de créditos del 3.25 al 3.75, manifestó que es una medida efectiva, pero que lesionará el patrimonio de los contribuyentes que cuenten con cualquier tipo de deuda, teniendo que pagar más dinero.
Acerca de la disparidad entre la moneda nacional y la divisa estadounidense, dijo que ésta no tiene razón de ser dada la situación económica del país, ya que se cuenta con reservas monetarias en su máximo histórico, finanzas públicas sanas, deuda controlable y un presupuesto de ingresos mayor al de 2015, por lo que afirmó que “se están manipulando los tipos de cambio”.
“Antes se desviaban fondos, ahora se apuesta al tipo de cambio” aseguró, por lo que la clase de mayor poderío económico del país se está enriqueciendo mediante la especulación.
Sobre el recorte al presupuesto de egresos de 132 mil millones de pesos -0.7 por ciento del Producto Interno Bruto-, dijo este es ficticio, ya que la nueva tasa de interés, que permitirá una mayor percepción para la administración pública, generará un monto mucho mayor.
“El recorte es ficticio, pero frena el tipo de cambio” aseveró, agregando que más dinero público no quiere decir mejores condiciones de vida para los mexicanos.
Detalló que el presupuesto de 2005 fue de 1.4 billones de pesos, mientras que el de 2016 alcanzó los 4.76 billones, sin que exista por esto, mejor infraestructura, mejor educación y menos pobreza.
El abogado manifestó que no puede culparse a la caída de los precios petroleros por la devaluación del peso, ya que este precio se encontraba asegurado y porque la economía mexicana ya no está petrolizada en la misma medida que una década atrás.