Tras una desaseada contienda electoral, el Partido Revolucionario Institucional se impuso en la elección al Gobierno del Estado de Colima, donde celebraron comicios extraordinarios, y el tricolor ya gobernaba.
El virtual ganador es José Ignacio Peralta Sánchez, quien lo fue también en la elección ordinaria del 7 de junio de 2015, hasta que en octubre del mismo año, el Tribunal de Justicia Electoral de la Federación anuló su victoria.
Los magistrados encontraron evidencia que probaba que recursos y funcionarios del gobierno estatal se movilizaron a favor del candidato priista. Por ello, los comicios del domingo 17 de enero de 2016, se desarrollaron en un clima tenso y enardecido por la sombra de fraude electoral, advirtió Rogelio Guedea, analista político y doctor en Letras por la Universidad de Córdoba, España.
El recuento de incidentes lo integraron decenas de casos; hubo detenciones de tráileres con despensas, dinero y material electoral apócrifo. Además, robo de material electoral, boletas marcadas y reparto de despensas a favor del PRI.
Luis Zamora Cobián, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral para la elección extraordinaria en Colima, confirmó la sustracción de mil 929 boletas de tres casillas localizadas en Tecomán y Manzanillo, así como ataques de personas desconocidas en las casillas, quienes actuaron con violencia y amenazaron al personal electoral. El INE anunció que el 91 por ciento de las casillas fueron debidamente instaladas.
Fue tanta la alerta en el Estado que la autoridad federal incorporó la vigilancia por medio de aeronaves. Por su parte, el INE informó que en los municipios de Colima circularon unidades móviles para atender reportes y quejas sobre el desarrollo de los comicios.
Finalmente, los resultados preliminares beneficiaron al candidato del PRI, quien fue felicitado -incluso antes que comenzaran los primeros conteos– por el dirigente nacional de su partido, Manlio Fabio Beltrones.
118 mil 772 votos a favor de la alianza priista (PVEM-PT-PANAL) frente al segundo lugar de Jorge Luis Preciado, del PAN, con 108 mil 604 votos: 43.23 y 39.52 por ciento, respectivamente. Muy lejos quedó Locho Morán con el 12.09% de los votos, es decir, 33 mil 237 sufragios.
El descalabro no solo fue para la cúpula del PAN y su dirigente nacional, Ricardo Anaya, quien apoyó a Preciado desde hace más de un año, sino que al menos tres partidos no alcanzaron la votación mínima para mantener su registro. MORENA, PRD y PES obtuvieron menos del 2% de los votos; Movimiento Regeneración Nacional no logró siquiera el .9%.
Jorge Luis Preciado, el candidato del PAN a la gubernatura, culpó al PRI del robo de boletas: “Es parte de las estrategias que utiliza Manlio Fabio Beltrones en Sonora y estamos atentos”, declaró el domingo 17 de enero. Pero horas después de la elección admitió el resultado.
Por su lado, Beltrones expuso a la prensa -pese a todas las irregularidades que se registraron y que se le atribuyeron de nuevo a su partido- que una anulación más resultaría “ridícula”.
