De fiesta en Baja California, Los Cafres recorrieron la entidad compartiendo la celebración de un cuarto de siglo dedicado a la música en la que han izado la bandera del reggae en Latinoamérica, poniéndole el español y la sazón del Cono Sur a los ritmos jamaicanos. De la mano de Guillermo Bonneto, el grupo argentino arribó a la entidad para presentarse el último jueves de noviembre en el puerto ensenadense, seguido el viernes por el recital en la capital bajacaliforniana, para culminar con un majestuoso encuentro con los tijuanenses el sábado 28 por la noche. Acumulando éxitos tatuados en el alma y sentimiento de miles, Los Cafres iniciaron la velada en Black Box, ubicado en la mítica Avenida Revolución, con “Sin Semilla”, tema con el que la legendaria agrupación celebró memorable performance ante un millar de privilegiados fanáticos. Ratificando su éxito, Bonetto y compañía enumeraron su cancionero interpretando temas como “Casi que me Pierdo”, “Si el Amor se Cae”, “Tus Ojos”, “Bastará”, “De mi Mente”, “Si te Da lo Mismo”, “La Receta”, “Solo un Pensamiento”, “Este Jardín”, entre otros que consagraron la noche en un inmueble a reventar. Puntuales a las 21:00 horas, Claudio Illobre, Gonzalo Albornoz, Guillermo Bonetto y Sebastián Paradisi, además de músicos invitados en sección de metales, teclados y guitarras, saltaron al escenario regalando una larga introducción sonora que recogió estrofas de sus más grandes éxitos, aclamados por los treintañeros y cuarentones que ahí alzaban sus vasos de cerveza. 
En una velada que quedará para la historia, Los Cafres atinaron con dulzura y madurez cada episodio; el romántico, el revolucionario, el de toque rastafari, y hasta el de la crítica social. Sobreviviendo a la historia, el cuarteto argentino sumó a Baja California en su gira internacional, con la que celebran 25 años de música, misma a la que rinden tributo con sus versiones a los grandes de la música como el cantante jamaicano Gregory Isaacs. Compartiendo su alegría, Bonetto interpretó “Number One” de Isaacs, ante la algarabía de cientos que se hicieron notar vistiendo ropas coloreadas de verde, amarillo y rojo. Otro de los episodios que formó una aromática nube fue la versión de “Pimpers Paradise”, del legendario Bob Marley, así como la peculiar manera de instrumentar sus propias composiciones que se extendieron hasta cerca de las 23:00 horas. Punteando el movimiento del reggae contemporáneo cantado en español, seguidos por bandas como Cultura Profética, Gondwana, Dread Mar I, y Nonpalidece, Los Cafres hicieron la diferencia la noche del sábado, haciendo hincapié en que el reggae latino se conformó de influencias y retroalimentación, sin embargo, demostraron por qué su riqueza musical atrae a chicos y grandes, y sobre todo se mantiene vigente atrayendo a nuevos adeptos. Actualmente Los Cafres preparan su décimo disco de estudio, el cual grabarán entre febrero y mayo de 2016, dando a luz a un álbum de “cosas muy bonitas y muy sentidas”, además de los proyectos discográficos en vivo grabados en su natal Buenos Aires, Argentina, como “25 Años de Música”, título que comparten con su gira.
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