Tres hombres se declararon culpables de comprar armas y cartuchos adquiridos en Estados Unidos y trasladados a México por la frontera entre California y Baja California. Jesús Albino Hernández, Francisco Rodríguez y José Luis Mendoza Valenzuela, admitieron haber traficado ametralladoras calibre .50, rifles Ar-15 y AK-47 conocidos como “cuernos de chivo”. De acuerdo con información proporcionada por la Fiscalía Federal del Distrito Sur de California, entre 2013 y 2014, los procesados y sus cómplices, escondían las armas en las bocinas de sus vehículos para cruzar a las garitas de México, localizadas en Baja California. Como parte de los acuerdos firmados por los acusados, éstos entregaran todas las armas y cartuchos que fueron confiscados en el caso, las cuales incluyen tres ametralladora calibre .50, dos “cuernos de chivo”, dos rifles AR-15, un rifle PS90, una pistola 9 milímetros y más de dos mil cartuchos. Tanto las armas como las municiones serían traficadas hacia México, pero fueron decomisadas un operativo para detener a los acusados en Estados Unidos. Frente a la Corte, los jóvenes de entre 21 y 27 años, admitieron que las armas fueron adquiridas legalmente en establecimientos de la Unión Americana, donde registraron los rifles y pistolas como de su propiedad. La audiencia para su sentencia, se celebrará en febrero de 2016. La pena máxima por este delito es de cinco años en presión y una multa de 250 mil dólares, pero ya que los acusados se declararon culpables, es probable que se les fije una condena menor.