Yendo por la Vía Rápida Alamar y por el puente del boulevard Federico, se observan 3 tambos, tinacos, calderas enormes, color rosa y morado. Parecen eso, depósitos contra incendios, o depósitos de agua tratada, lista para exclusivo riego de jardines. De lejísimos rápido se viene a la mente tal idea, pero no, es el carísimo centro CRIT, que edifica la pareja gubernamental de B. C., la señora Ruacho de Vega y comitiva. Se ha edificado tan pronto, de ya, como si fuese una construcción de una religión no católica, como fue construido el centro de reunión de mormones allá por el Insurgentes, conectando a la Vía Rápida hacia el Centro; bueno, cerca del famoso Cañaveral. Como si se tratara de una construcción religiosa ajena a la que fundó Cristo, así ha sido construida tal obra del CRIT. Pero su arquitectura asemeja tambos, tinacos de agua tratada a escasos 500 metros del residencial San Carlos del Gobernador del estado, Francisco Arturo Vega de la Madrid. Obras en común, hay poder, hay billetes, hay gustos y sobre todo caprichos. Tales tinacos están a la izquierda bajo el puente peatonal de la central camionera. A todo vapor va la obra. Y cuál se estrenará primero, ¿San Carlos, o CRIT como similitud a tinacos rosa y morado, que dan otro aspecto? La mente es poderosa y crea, imagina, compara, asemeja, saca conclusión de apariencia, innova y eso es lo que a mí me parece el edificio del CRIT, 3 gigantes tanques, tambos, tinacos, contra incendios o depósitos de aguas ya tratadas y listas para abrir la llave y regar el Parque Morelos porque está muy seco. Buena idea, ¿verdad? No importa que estén en mi Tijuana, que me vio nacer, a veces las opiniones sí son para mejorar y dar otras formas arquitectónicas y mejorar en aspecto, apariencia, porque la vista es engañosa y creadora sabiéndola usar. Las opiniones y críticas nos hacen crecer y hay que decir bienvenidas. Las opiniones o los consejos son para ser mejor y a veces molestan, pero dicen la verdad, ¿verdad? Leopoldo Durán Ramírez Tijuana, B. C.