“Luis, tómame de la mano”. A lo que Luis responde sin siquiera voltear: “¡No!”. — Luis, abrázame. “¡Que no!”. — Luis, bésame. “¡No!”. — Pero Luis, si todas las parejas se toman de la mano, todas las parejas se abrazan, todas las parejas se besan, ¿por qué nosotros no? “¡Porque nosotros somos policías, Armando!”. Autor: Un ministerial.