A través del programa “Adopta una Esperanza” impulsado por la Fundación Castro- Limón, personas pueden apadrinar a un menor diagnosticado con cáncer para colaborar de alguna manera con los gastos requeridos para su tratamiento y recuperación. Esta mañana, en el desayuno anual que la fundación organiza para que padrinos y apadrinados tengan un espacio de convivencia, nueve pacientes fueron declarados libres de cáncer. Con ellos, suman 40 los pacientes que se han visto beneficiados por medio de este programa. Ser padrino o madrina consiste en una aportación desde 100 pesos al mes, con un compromiso de un año, ese tiempo sirve para que el patrocinador se dé cuenta del funcionamiento del proyecto y se convenza de la transparencia del mismo. De igual manera, cada tres meses se informa sobre el estado actual del niño al que se está apoyando, esto con la finalidad de que se tenga una actualización de su desarrollo. “Con 100 pesos al mes puedes salvar la vida de un menor”, señaló Pedro Cruz Camarena, director general de la fundación, quien recalcó la importancia de ayudar y participar en este tipo de eventos que contribuyen a la recuperación de los infantes diagnosticados A la fecha, el Centro Oncológico Pediátrico de Baja California, atiende a 74 menores por medio de la Fundación Castro- Limón, la cual cuenta un registro de 764 padrinos participando en Adopta una Esperanza.