“Me defraudó mucho la religión y me refugié en la literatura”: David Muñoz

El cuentista mexicano radicado en Arizona, Estados Unidos, presentó en Tijuana su más reciente título “El Santo Don Patricio y otros demonios” (Garabatos, 2015), en Tijuana, el martes 3 de noviembre, luego de las 18:30 horas en la Sala de Usos Múltiples del CEART. Después de participar en “Lunas de Octubre” de La Paz y “Bajo el asedio de los signos” de Ciudad Obregón, David Muñoz regresó a Baja California para compartir su libro de cuentos en el Centro Estatal de las Artes de Tijuana, con la participación de Olga Gutiérrez García y Roberto Castillo Udiarte, moderando la presentación editorial Karina Balderrábano, coordinadora de Literatura en el CEART. David Muñoz recordó durante la presentación que incursionó durante muchos años como pastor protestante en Estados Unidos y que “quería salvar al mundo”; pero la literatura lo estaba esperando para desmenuzar “el lado oscuro del ser humano”, concretamente en “El Santo Don Patricio y otros demonios”, título del cual leyó algunos cuentos que los asistentes disfrutaban debido al tono socarrón de los relatos. En 181 páginas, David Muñoz entrega 42 cuentos cortos de una y tres o cuatro páginas donde el lado oscuro del ser humano encuentra una luz: “‘El Santo Don Patricio y otros demonios’, intenta representar de una manera fiel y realista, ese lado negro de la condición humana. No con la intención de enjuiciar o condenar los comportamientos, ya que la literatura sobrepasa la moralidad entrando en el campo de la simple honradez, escribiendo la verdad, realidades que todos sabemos existen, pero que algunos desean seguir ignorándolas, permaneciendo enclaustrados en una narrativa absoluta, que considero ya murió definitivamente a fines del siglo XX”, sostiene el autor. – ¿Qué te ha dado la literatura a diferencia de la filosofía, la teología y en general la religión?, cuestionó el reportero. “La literatura me ha dado una libertad muy grande, la libertad de cuestionarlo todo, la libertad de expresar realmente lo que siento, de reflejar la compleja experiencia humana, de que si miro una escena en la calle la puedo poner en papel sin cuidarme de nada”. “Me defraudó mucho la religión, encontré mucha falsedad, y me refugié en la literatura”, sentenció el editor de http://www.peregrinosysusletras.com/