Aunque pone cara que no le duele solo cuando se ríe, Antonio Valladolid Rodríguez, el Secretario de Finanzas a fuerzas del Gobierno del Estado de Baja California, ha armado su estrategia para hacer parecer que aquello de cuando el Gobernador Francisco Vega lo “bajó” de la competencia por la candidatura a la alcaldía de Tijuana por el PAN, no le ha afectado en lo más mínimo. Para empezar, detuvo la carísima inversión en medios electrónicos y redes que traía para promocionarse y dejarse ver en cuanto uno prendiera la computadora, además suspendió las reuniones que con líderes sociales había iniciado, y en el discurso, su nueva letanía para justificar el “estate quieto” que le puso Vega, es que el mismísimo Gobernador lo sacó de la contienda panista interna por la Alcaldía, porque –EN ZERIO!– lo quiere de candidato a Gobernador de dos años en la elección parteaguas del 2019 en Baja California para empatar los procesos electorales locales con los federales. Y, bueno, dicen que sí hay personas que le creen a Valladolid eso que dejó solo a Juan Manuel Gastélum en la contienda azul, para preparase para la grande en el 19; otros piensan que es estrategia de Valladolid para decir que no le duele el descenso político.