Gracias al esfuerzo conjunto entre la Policía Estatal Preventiva (PEP) y la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), se logró la captura de Isaac Chávez Cabrera, alías “El Puma” y de Onoel Leyva Torres, el primero líder del grupo delictivo “Los Erres” y el segundo su jefe de escoltas. El 9 de noviembre de 2015, con pocas horas de separación se logró la aprehensión de ambos en un operativo entre fuerzas estatales y federales y puestos a disposición del Ministerio Público del Fuero Federal. A Leyva Torres se le habrían asegurado un revólver calibre .357, 5 y una pistola 9mm, además de cargadores y 35 cartuchos útiles entre ambos calibres. A esta banda delictiva se les atribuye parte en la alza de homicidios en Tijuana, por su pugna con otras organizaciones dedicadas al narcomenudeo de marihuana y cristal, principalmente en la Zona Norte, si bien también se señala que esta banda –también conocida como los R4 o los Pelones- operaba en el Soler, Centro, Los Altos y Palmeras. Si bien se presume que esta banda operaba en Tijuana de manera independiente, se presume que realizaba trabajos para el Cartel Arellano Félix como para el Cartel de Sinaloa, indistintamente. Actualmente, Los Erres trabajaban a disposición de José Antonio Soto Gastelúm, alias “El Tigre”, narcotraficante que mantiene conflicto territorial con un grupo de ex sicarios de Alfonso Lira Sotelo, alias “El Atlante”.
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