Consignan a “El Puma” de “Los Erres”, se dice inocente

Isaac Alhiu Chávez Cabrera “El Puma” presentado el 9 de noviembre de 2015 por la Policía Estatal Preventiva como brazo derecho del jefe de célula de narcotraficantes,  Javier Adrián Beltrán Cabrera cabecilla de “Los Erres”, negó los cargos ante el Ministerio Público Federal, sin embargo fue consignado por delitos contra la salud y delitos estipulados en la Ley de Armas de Fuego y Explosivos ante el juez Sexto de Distrito.  La mujer que lo acompañaba Maritza García, corrió la misma suerte. En aquel momento, vía boletín la PEP informó que: “Durante la intervención- de Chávez y su pareja-  fue asegurada un arma de fuego calibre 9 mm abastecida con 7 cartuchos útiles, un arma larga de las conocidas como “Cuerno de Chivo” calibre 7.62 x .39 mm con 14 municiones. “Además en la cajuela del automóvil se localizaron 9 paquetes que en suma pesaron 13 kilogramos de marihuana”. Con esos elementos, los detenidos fueron presentados en la PGR donde determinaron que el detenido no tenía lesiones, y abrió la averiguación previa AP/PGR/BC/TIJ/2473/2015 que concluyó en su consignación. Sin embargo, en sus dichos ante la autoridad el presunto criminal expuso una versión totalmente contraria a la dada por las autoridades.    De inicio, Chávez Cabrera aceptó declarar y responder solo preguntas de su abogado Omar Rodríguez Martínez. Posteriormente aseguró que el día de su captura no lo detuvieron mientras circulaba. Su historia fue que elementos de la PEP pusieron un retén para detenerlo a la altura de la mueblería Dico, en la entrada de la carretera Rosarito al Libramiento Rosas Magallón y lo detuvieron minutos después de salir de su casa en el fraccionamiento San Agustín. Aseguró que al verlo, sus aprehensores comentaron “Este es…” y luego le dijeron “…tu eres hermano de José el que mataron en Mexicali”, “…me preguntaban por qué lo habían matado”, “…también por un hermano que se llamaba Javier”. Por el contenido del boletín de la PEP se puede saber que se referían al líder de célula Javier Adrián Beltrán Cabrera y a su hermano el fallecido José Antonio Beltrán Cabrera “El R4” (asesinado 11 de mayo de 2013), segundos a bordo del líder del Cártel de Sinaloa de José Antonio Soto Gastelum conocido por el apodo “El Tigre”. Y las autoridades manejan la hipótesis de que Chávez es medio hermano de los Beltrán. “El Puma” aseguró que su respuesta fue “…que no tenía relación con ellos, que sabía que vivía en el sur del país y se había ido hace como 2 años”. Luego afirmó que los policías le habían fabricado los cargos, que lo llevaron a un cuarto,  sacaron un arma larga y una corta de un casillero y lo obligaron a empuñarlas, “…forzándome la pusieron en mi mano, y después me quitaron el arma”. Y lo mismo hicieron con varios paquetes aparentemente de droga, de los cuales él les dijo desconocer el origen. También dijo que escuchó a los agentes decir que iban a meterse a su casa, y después mientras estaba en detención escuchó la voz de Onoel Leyva Torres, quien es como su hermano y vive en su casa. Pero cuando les preguntó a los policías por su amigo le respondieron “…no te hagas pendejo estaba en tu casa y tenías armas”. La versión boletinada de la PEP indicaba que Leyva – presentado como escolta de “El Puma”- fue detenido, “en las inmediaciones de la colonia La Joya”.  Antecedentes de “Los Erres” De acuerdo a los informes  de inteligencia del Grupo Coordinación “Los Erres” y las declaraciones de estos cuandos han sido detenidos,   Isaac Alhiu Chávez Cabrera “El Alio” es quien los dirige en nombre de los Beltrán y Soto Gastelum.  La mayor parte de la célula (10 hombres) fueron detenido el 24 de enero 2010 en una casa, mientras tenían secuestrado a un comerciantes, además estaban en posesión de armas y droga, sin embargo años después todos fueron exonerados judicialmente, la Juez Primero del Distrito, María Elena Recio, la Juez Primero de Amparo, Rosa Eugenia Gómez Tello; y Juez Octavo de lo Penal, Jaime Galindo Hernández, dictaron sus libertades. Las autoridades también los señalaron como involucrados en el intento de homicidio de un policía municipal el 10 de septiembre de 2008, en el asesinato del policía municipal Raúl Ruiz Martínez, ocurrido el 21 de agosto de 2013, y el secuestro de un comerciante en la unidad habitacional Infonavit Ejército Trigarante en Tijuana, el 17 de diciembre del mismo año. Y más recientemente en agosto de 2015 en una balacera en una funeraria de Tijuana. Pese a  los señalamientos, incluso a través de boletines,  no han sido acusados formalmente de ninguno de esos crímenes.