Estaba un hombre gordo, pero muy gordo en la puerta de un colegio. Una profesora le pregunta: — Oiga, ¿espera usted a un niño? “No señora, siempre he sido así”. Autor: Un flaco odioso.
Estaba un hombre gordo, pero muy gordo en la puerta de un colegio. Una profesora le pregunta: — Oiga, ¿espera usted a un niño? “No señora, siempre he sido así”. Autor: Un flaco odioso.