Jaime Delgado tiene un portal noticioso en la Internet. Periodismo Negro, se llama. También ha sido colaborador y reportero de varios medios impresos de Baja California, entre ellos ZETA, La Crónica, El Mexicano; es pues un periodista con experiencia y crítico. Y desde la Capital del Estado ha sido testigo de las irregularidades, la corrupción, las transas, la inseguridad y la negociación política. De todo ha dado cuenta en materia periodística. En este reportear no ha sido ajeno a las actividades que el Alcalde Jaime Díaz Ochoa y su pareja Sonia Carrillo, llevaron de lo público a lo privado. Primero porque el Presidente Municipal contrató a su novia en calidad de Secretaria Particular, después por jubilarla con un sueldo muy superior a la base que la dama tenía antes de ser pareja del ex Senador. Después, por aparecer en actos públicos tomados de la mano, retozando e incluso propinándose besos. De todo ello y más, escribió Jaime Delgado. Hasta que el día 20 de noviembre del 2015, le fue entregada en su domicilio, una demanda civil por Daños al Patrimonio Moral de Sonia Carrillo. La ahora Presidenta del DIF, como todas las esposas del resto de los alcaldes de Baja California, acusó al director de Periodismo Negro de afectar su reputación y como prueba presentó copia de 34 notas informativas publicadas en el portal de Internet. La medida cautelar que le concedió el Juez Jorge Duarte Magaña, Tercero de lo Civil, dice: “…Con fundamentos en los Artículos 6 y 7 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, deberá proceder el C. Actuario a apercibir al demandado a fin de que durante el trámite del juicio se abstenga de realizar o publicar manifestación alguna que pueda afectar la vida personal de la actora que a su vez le pueda ocasionar un daño moral, apercibiéndole que en caso de no hacerlo se harán acreedor a cualesquiera de los medios apremiantes consistentes en multa de hasta 50 veces el salario mínimo vigente en el Estado o hasta arresto”. Delgado afirmó que la resolución del juez Duarte es censura previa, al dictar medidas cautelares en las que le prohíbe escribir sobre Carrillo, además de que no existe un peritaje del daño moral que supuestamente se presentó. Indicó que a finales de septiembre recibió de la Correduría Pública un documento en donde se le advierte que deje de escribir sobre la ex funcionaria –ya que se jubiló meses atrás– o de lo contrario sería demandado legalmente. La advertencia se hizo valida el 20 de noviembre cuando la firma representada por el despacho legal de Elías Flores Gallegos, “FG Abogados” abrió el expediente 1015/15 en el juzgado Tercero de lo Civil en contra del periodista pidiendo Reparación del Daño Moral basándose en los artículos 1794 del Código Civil del Estado. Pero Delgado no es el único afectado por la novia del Alcalde de Mexicali. La mañana del lunes 23 de noviembre de 2015 apareció una plana completa en el periódico El Mexicano titulada “Sonia Carrillo tiene otra cara” firmada por María Elena Díaz con seis fotografías de la pareja del Alcalde, que como buen reportaje a modo, buscaba reivindicar las críticas que le han realizado a Carrillo. La entrevista apareció el mismo día que el alcalde Jaime Díaz presentaría su informe, mencionando los ataques de medios de comunicación y redes sociales en donde acusó que la han –satanizado– y que su único pecado fue el de “amar a Jaime”. Varios reporteros de El Mexicano se indignaron ante la publicación. Uno de ellos, Armando Nieblas comentó su molestia en su cuenta personal de Facebook. La respuesta del director del diario fue despedirlo ese mismo día, por criticar a Sonia Carrillo. Para la vacante en El Mexicano, fue contratada una funcionaria de la Dirección de Seguridad Pública Municipal que hasta el miércoles –por lo menos– no había renunciado a su trabajo en la dependencia por lo que fue la encargada de cubrir la nota del informe. ZETA entrevistó a la Presidenta del DIF durante el II Informe de Jaime Díaz: — ¿Qué opina con relación a la demanda que interpuso contra un periodista? “Ése es un tema entre dos seres humanos y es un tema que se tiene que ver entre abogados”. — ¿Pero usted es figura pública? “Yo no soy funcionaria, eso no es tema, ése no es tema, o sea, es un tema entre dos seres humanos, que se arregle jurídicamente” y finalizó apresuradamente la entrevista.