Mientras que el caso del prófugo narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán sigue presente en los principales noticiarios del país con notas que prueban la corrupción que envolvió su fuga de prisión hace tres meses, en Durango y Sinaloa la persecución que realizan autoridades ha ocasionado molestias a la población de algunas comunidades. Las piezas informativas sobre el video con audio grabado de la celda que ocupaba el capo en el penal de máxima seguridad del Altiplano, donde se escucha el ruido previo a su escape por un túnel y la versión de que su televisor tenía localizador satelital (GPS) destacan por encima de los presuntos abusos de autoridad cometidos por las fuerzas federales que rastrean al evadido. A través del medio de comunicación sinaloense Río Doce, durante varios días se ha dado seguimiento a los presuntos ataques aéreos que han sufrido algunas comunidades del municipio de Tamazula, Durango, donde se reporta la presencia de tropas navales. Las rancherías agraviadas se ubican en Acachuane, Palo Verde, Los Limones y El Venado. Decenas de vecinos de esas localidades salieron despavoridos y caminaron durante tres días para refugiarse en Cosalá, Sinaloa, desde donde denunciaron tiroteos desde helicópteros artillados, presuntamente militares. Son más de cien los duranguenses desplazados quienes aseguran que literalmente “llovían balas”. A través de un comunicado, la Secretaría de Marina desmintió su intervención en la agresión armada en contra de la población civil; mientras que el gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez y el comandante de la Tercera Región Militar, General de División Alfonso Duarte Múgica, aceptaron que el gobierno federal busca en la zona del Triángulo Dorado a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera. Sin embargo, el mandatario sinaloense no confirmó que se trate de elementos de las fuerzas navales ni tampoco la versión de que en las incursiones militares en Durango habría sido derribado un helicóptero. “No soy vocero de la Secretaría de Marina”, dijo López Valdez. Por su parte, en los Estados Unidos la cadena de televisión CBS informó que “El Chapo” Guzmán logró escapar la semana pasada –del 5 al 11 de octubre– de un operativo de la Secretaría de Marina en un rancho en las montañas de la Sierra Madre. Según CBS, las autoridades mexicanas recibieron información de las agencias federales de Estados Unidos sobre la supuesta ubicación geográfica del líder del Cártel de Sinaloa “pero cuando los marinos mexicanos llegaron ahí, lo único que encontraron fue ropa y otros artículos que ellos creyeron habían sido abandonadas por el elusivo jefe del crimen”. Los hechos han traído otras versiones. La más difundida, la de que el alcalde de Tamazula –Ricardo Ochoa Beltrán– es concuño de “El Chapo”, pues su esposa y presidente del Sistema DIF –Érika Guadalupe– lleva por apellidos los de Coronel Aispuro, como Emma, la mujer de Guzmán Loera. La primera dama del municipio duranguense tuvo que salir a aclarar que no tiene ningún parentesco con Inés Coronel Barrera, ni con los hijos de éste, Emma e Inés Coronel Aispuro, pues ambos apellidos son muy comunes en la región. “Yo soy hija de José María Coronel Félix, originario de La Junta, Sinaloa, fallecido en 1997 y mi mamá es de Tamazula”, señaló la cuestionada. “El Chapo” en tribunales Desde la fuga del narcotraficante Guzmán Loera hasta la fecha algunos de los procesos penales en su contra y juicios de amparo promovidos a su favor se encuentran suspendidos, pero otros han seguido su cauce hasta llegar a sentencia. Tal es el caso del juicio de derechos fundamentales 63/2014, en el que el Quinto Tribunal Unitario en el Estado de México le negó el amparo al líder del Cártel de Sinaloa contra el auto de formal prisión que le fue dictado el 22 de mayo de 2014 por su probable responsabilidad en el delito de delincuencia organizada en su hipótesis de cometer delitos contra la salud. El tribunal encontró ajustada a derecho la resolución dictada por el Juez Sexto de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en el Estado de México en la que se señala a Joaquín Archivaldo como el dirigente del Cártel de Sinaloa, derivado del proceso penal seguido a cultivadores de marihuana detenidos en esa entidad y con declaraciones de testigos protegidos. Por su parte, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Penal con residencia en Toluca concedió un amparo a Miguel Ángel Guzmán Loera “El Mudo”, hermano del “Chapo”, para el efecto de que se le conceda el beneficio de libertad preparatoria por el delito de portación de arma de fuego de uso exclusivo del ejército, por el que recibió una pena de tres años tres meses de prisión y que le había sido negado por el Juez Sexto de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en el Estado de México, a pesar de tener más de diez años preso. “El Mudo” tiene otra condena por delincuencia organizada y el 30 de septiembre fue trasladado del penal de máxima seguridad de Almoloya de Juárez al Cefereso número 13, en Oaxaca. Quien también resultó beneficiada por un amparo es Agustina Cabanillas Acosta y/o Andrea Acosta Bojórquez “La Señora”, señalada como “novia” de Joaquín en su breve estancia en Punta Ballena, en Los Cabos el año 2012. La mujer, sentenciada a cinco años de prisión por delitos contra la salud en la modalidad de posesión de metanfetamina con fines de comercio, recibió la protección de la justicia federal de parte del Tribunal Colegiado en Materia Penal del Decimosegundo Circuito para que se reponga su procedimiento en el Juzgado Tercero de Distrito en el Estado de Sinaloa.