Frenar con infraestructura verde los escurrimientos derivados de precipitaciones pluviales, y así evitar el posible colapso de las instalaciones hidráulicas de Tijuana, propuso el Colegio de la Frontera Norte (El COLEF). Las lluvias torrenciales que se prevén para la región podría desbordar la presa Abelardo L. Rodríguez, al carecer Tijuana de un sistema que encauce el cien por ciento de los escurrimientos de agua, advirtió Roberto Sánchez Rodríguez, profesor investigador del Departamento de Estudios Urbanos y Medio Ambiente de El COLEF. Al efectuarse la segunda reunión con actores clave para la estrategia de adaptación a eventos hidrometereológicos y climáticos del municipio de Tijuana, el catedrático presentó el proyecto de investigación “Desarrollo de estrategias de adaptación al cambio climático en municipios vulnerables del noroeste de México”. Recordó que al vaso hidráulico confluye una cuenca binacional, cuyo 30 por ciento se ubica en California, Estados Unidos, y el 70 por ciento del lado mexicano, lo que lo vuelve vulnerable a la hora de captaciones pluviales atípicas. Anotó que en Tijuana “el drenaje pluvial sigue siendo un problema recurrente”, con todo y que se ha ampliado, “el drenaje no va a la par del crecimiento urbano”, dijo. Al no contar la ciudad con un sistema pluvial suficiente para encausar el agua de lluvia, las inundaciones en zonas de escurrimiento son inevitables. Y ni qué decir de los taludes, cuya estabilidad se ve comprometida con 30 milímetros de lluvia, mientras que con 40 milímetros el suelo se ve afectado, generando colapsos. Para contrarrestar esta afectación, Sánchez Rodríguez estimó que forestar la ciudad en forma programada, es una de las opciones más viables y económicas que podrían permitir a Tijuana solventar el déficit de drenaje pluvial y evitar su saturación en temporada de lluvia. Los techos verdes, conformados por una capa vegetal que almacena agua, constituyen una alternativa para retrasar el flujo de agua hacia el alcantarillado, además de funcionar como aislante; el líquido almacenado puede ser reusado en sanitarios o el riego de jardines, explicó. Para ello se requiere de diseño y material adecuado que no representa un alto costo, el cual se estará presentando a los sectores productivos para ser implementado en empresas, particularmente en naves industriales. Al final de la reunión, se propuso promover el uso de infraestructura verde dentro de la normatividad de construcción, además de mejorar la planificación de la obra pluvial.