Poco antes de las nueve de la noche del 30 de septiembre, se escucharon balazos en la colonia Sánchez Taboada, desafortunadamente para los residentes de la zona es un sonido conocido. En el interior de una construcción en obra negra sobre el callejón Quintana Roo y Vía Láctea, una mujer caía muerta con tres orificios en la cabeza. Reportada como desconocida, fue la quinta víctima femenina de asesinato con arma de fuego contabilizada en Tijuana solo en la semana que concluye. Información de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) indica que hasta el 27 de septiembre sumaban 485 homicidios violentos en Tijuana, 52 fueron mujeres. Al jueves 1 de octubre sumaban 57. En Mexicali, el martes 29 de septiembre, con el asesinato de Melany Martínez, eran 20 las mujeres fallecidas en condiciones violentas. Rosarito tampoco quedó exento, una mujer fue baleada en una casa ubicada en la colonia Aragón. “En Tijuana no tenemos el tema de alerta de género afortunadamente. En esta ciudad, un número importante de homicidios de mujeres está ligado al narcomenudeo, incluso aunque las víctimas no se dediquen a esta actividad ilícita” explicó el subprocurador de Investigaciones Especiales dela PGJE, José María González. Ejemplificó con los homicidios de esta semana: “Dos de las señoras tienen antecedentes que vendían droga, incluso a uno de los cuerpos se le encontraron enervantes en posesión. Pero en otras dos, una era hija de una vendedora de drogas y la otra era nuera, no tenían que ver con el negocio ilegal de sus parientes, pero igual las mataron. Incluso en dos de esos asesinatos usaron la misma arma”. Este incremento en los homicidios de mujeres, es algo que ya llamó la atención del Concejo Ciudadano de Seguridad Pública encabezado por Jonathan Díaz, sin embargo, apenas están solicitando datos. “Es un cochinero” dijo un agente operativo, “antes respetaban a la familia, el tiro era directo con la persona, pero éstos están matando niños, mujeres, primos, tíos, padres hijos. Es un ‘no te encontré pero agarré a tu hijo, tu hermano, tu mamá’. “Recién tuvimos un caso en el que mataron a padre e hijo, el de la presunta deuda criminal con el grupo delictivo era el hijo, y mataron primero a su papá que no tenía que ver, para que los viera. En ese nivel están”. Cuando se le pregunta por qué el incremento de la violencia; responde: “Porque los actuales dizque sicarios son adictos a los que les pagan 200 o 300 dólares, y no tienen problemas con matar incluso a los miembros de su célula incluso sin que éstos hayan afectado al grupo”, e hizo referencia al recién capturado Sergio Lucatero Ortega alias “El Pijamas”, quien asesinó a Pedro Edgar Hidalgo Pérez y a Ana Karen Céspedes Molina 2 de julio de 2015 en Otay. “El joven pasaba droga a Estados Unidos -la muchacha no- para su grupo criminal, Saúl, el jefe de ambos, le pagó para matarlo para no tener que pagarle a Hidalgo los cruces que le debía, a razón de 200 dólares cada vez que pasaba un carro cargado con enervantes”. La autoridad no informó cuánto le debía Saúl a Hidalgo, pero pagó 200 dólares por la muerte de la pareja, la joven mujer no era el objetivo, pero no les importó incluirla en el paquete homicida. Esta semana, otro ejemplo de matones adictos fueron Rubén Barrios Gómez y Doroteo Castro Zazueta, detenidos por el secuestro del adolescente de 13 años Ángelo Bonilla. Al ser capturados estaban totalmente drogados y trataron de matar a los policías que los perseguían. Las muertas de Tijuana Investigadores locales explicaron que los asesinatos de mujeres ocurridos entre el 28 de septiembre y el 1 de octubre dan una idea del patrón que se desarrolla en Tijuana. Miguel Guerrero, coordinador de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales, explicó: “En el caso de la mujer de la (colonia) Herrera, la principal línea de investigación es pasional, incluso traemos como presuntos responsable a su ex pareja, se pegaban en la calle, se tenían denunciados, pero aún estamos trabajando”. El subprocurador José María González agregó:” A dos de las mujeres asesinadas las atacaron con la misma arma, en el cadáver de una de ellas se encontraron envoltorios de droga, aquí estamos revisando la línea del narcomenudeo”. La mañana del lunes 28, los peritos levantaron el cuerpo sin vida de Ofelia Becerra, de 43 años. Estaba tirada en la banqueta frente al número 5 de la calle Chunique de la colonia Herrera, tenía un tiro en la cabeza a la altura de la oreja. Alrededor de las diez de la noche del mismo lunes, en la colonia Vista Alamar, en la prolongación de la calle Vista Alegre, sobre un camino de terracería donde se ubica un conjunto de viviendas irregulares construidas con tarimas de madera y cartón, a un costado del camino quedó el cadáver de una mujer aún no identificada, estaba boca abajo con una herida al costado y un casquillo calibre 9 milímetros a un lado. “Como señas particulares el cuerpo tiene la leyenda ‘Magdalena’ al borde de la mama derecha y ‘Cristian’ en la región escapular derecha”. De acuerdo con lo dicho por el subprocurador, el arma usada en este crimen se utilizó también con la menor baleada en Montes Olímpicos. Ataques a menores de edad En el caso de las dos menores de edad asesinadas, una muchachita de 14 años que mataron en una cuartería y otra de 17 que acribillaron junto a su pareja en el interior de una casa, González agregó: “Ahí las víctimas fueron asesinadas por ser parientes de… “. Estas dos mujeres fueron acribilladas el martes 29 de septiembre. Por la mañana los homicidas llegaron a una casa habitada pero aún en obra negra, localizada en Calle Torrecillas de la colonia El Niño, en La Presa Rural. Preguntaron por “el señor Ayala”, quien según las autoridades, es un conocido distribuidor de droga al menudeo en la colonia. La joven pareja que estaba en la casa respondió que no estaba y desconocían su paradero. Los muchachos amagados eran Dulce Rosario Castro Esparza, de 17 años y un embarazo de seis meses, y su pareja, Jorge Abdiel Ayala Escárraga, hijo del narcomenudista que buscaban. La escena del crimen indica que debió haber un período en que el joven intentó esconderse porque su cadáver fue localizado debajo de una cama, estaba boca abajo y mirando hacia la pared con un tiro en la cabeza. Sobre la misma cama quedó Dulce, que estaba sentada cuando recibió los mortales disparos en la cara y en el pecho. La noche del mismo martes los forenses levantaron el cuerpo de Isla Catheryn Vargas Martínez, su cadáver quedó sobre una cama en un cuarto hechizo con trozos de madera en la calle México de la colonia Montes Olímpicos. Era muy delgada, tenía apenas 14 años, medía 1.50 metros y era adicta, no debió ofrecer mucha resistencia a sus agresores quienes llegaron al cuarto que la menor compartía en concubinato con un joven de 19 años. Le preguntaron por su madre, una vendedora de droga de la zona “que había volteado bandera y a la que le habían advertido que no vendiera droga para otro grupo delictivo, pero no hizo caso”. De acuerdo con los investigadores, tampoco supo dar razón, y decidieron matarla como mensaje para la madre. “La mamá vivía en otro cuarto a menos de 20 metros de distancia, pudieron esperarla, mataron a la chamaca porque les dio la gana, porque fue más fácil”, expuso uno de los agentes. Adolescente secuestrado En la semana, los criminales también secuestraron en una cenaduría ubicada en la Zona Este, a Ángelo Bonilla, de 13 años, un grupo armado se lo llevó alrededor de las siete de la tarde del sábado 26 de septiembre. El muchacho y su madre estaban trabajando, atendiendo a los comensales. Denunciaron la desaparición de manera inmediata, de inicio una testigo identificó como sospechoso a un soldado que resultó inocente. Para el lunes 28, la prensa dio cuenta de la versión de una confusión, que el objetivo original era el hijo de la dueña de la cenaduría porque querían pedir rescate. El lunes, la Policía Municipal y la PGJE iniciaron operativos, reventaron casas de presuntos responsables en la zona. En la escena de la privación los criminales habían dejado un casquillo y la pistola estaba relacionada con otros dos homicidios y unos guardias lesionados en un bar, las áreas de inteligencia pudieron ubicar el grupo responsable. Tras reventar una casa en La Morita, dos hombres se dieron a la fuga, cuando los municipales perseguían a los sospechosos, éstos les dispararon. Así fueron detenidos Rubén Barrios Gómez y Doroteo Castro Zazueta, en posesión del arma usada en la privación del adolescente Bonilla. De entrada fueron consignados por el intento de homicidio de los policías y la posesión del arma, después confesaron el secuestro y dieron otras direcciones de casas de seguridad del grupo criminal, las cuales fueron revisadas por el Grupo Coordinación durante el martes 29. Poco antes del mediodía del miércoles 30 de septiembre, el muchachito fue liberado por sus captores sobre el Bulevar Insurgentes, “debido a la presión ejercida por las autoridades”, declaró el subprocurador de zona Tijuana, Jorge Álvarez. El padre de Ángelo- cuyos antecedentes estaban siendo investigados por la PGJE como posible causa de la privación- le prohibió a su hijo hablar con las autoridades, de tal suerte que el expediente por privación de la libertad en contra de los detenidos está estancado, aunque estén confesos, y exista el antecedente del arma. “El Moreno”, presunto responsable De acuerdo con las autoridades, las armas usadas en el asesinato de dos mujeres esta semana y en el secuestro del muchacho de 13 años, están ligadas a la célula criminal de Hugo Carlos Escobar Godoy “El Moreno”. Sinaloense, identificado por el Grupo Coordinación como cabecilla criminal en Tijuana desde diciembre de 2014. Con por lo menos cuatro capturas y liberaciones registradas entre febrero y septiembre de 2014 por narcomenudeo. A finales del año pasado, las autoridades informaron que estaba dedicado “al asesinato, al secuestro de migrantes y de pequeños comerciantes, a la venta de droga, homicidio, robo con violencia”, principalmente en la zona de El Florido y que lava el dinero que obtiene de sus actividades ilícitas a través de taquerías y salones de fiestas que posee en la Zona Este. De sus socios en el homicidio, refirieron en aquel momento a Susano Lobato Godínez “El Susano”, Israel Angulo Quiñónez “El Wimer” y los hermanos Dávalos Magaña, Hugo Gerardo y Jonathan Alfredo; y en el secuestro, a Florentino Sánchez Hernández “El Michoacano” y sus compinches, Junior Belem Sánchez Hernández y Reyver Sánchez Sánchez. Homicidio en el Pockets 493 asesinatos se cometieron en Tijuana en nueve meses, con 73 homicidios registrados, septiembre se convierte en el mes más violento para Tijuana. Hasta ahora, mayo y agosto tenían la máxima con 70 fallecimientos violentos, respectivamente. Y según estadísticas dadas por el subprocurador de Investigaciones Especiales, José María González, actualmente se resuelven dos de cada 10 homicidios que se incluyen en la estadística. Del total de muertes, 21 se ejecutaron entre el 23 y el 30 de septiembre, la mayoría de los asesinatos fueron relacionados con narcomenudeo y pleito territorial en las colonias por las autoridades. La excepción fue el doble homicidio perpetrado la madrugada del jueves 24 de septiembre en los billares Pockets Billiards & Fun, en la Zona Río. Ángel de la Rosa Reyes, de 27 años de edad, originario del Distrito Federal, murió en el lugar y su acompañante, Omar Castellanos Rentería, fue trasladado al Hospital General. En este expediente, los investigadores indican que De la Rosa Reyes era el objetivo del ataque y que este sujeto era uno de los atacados a balazos el 8 de agosto de 2015 en el restaurante Negro Durazo. “Era lo que los delincuentes llaman ´bueno´, porque ese día lo sacaron del lugar en una (camioneta) Hummer amarilla”, pero aún no saben con cuál grupo criminal operaba presuntamente. Melany asesinada en Mexicali El escenario de violencia se vio completo en el Estado con el atípico asesinato de Melany Martínez Juárez, de 33 años, de un disparo fulminante en el cuello que le rompió la medula espinal. No sufrió, posiblemente ni se percató de lo que había sucedido, ya que su muerte fue instantánea. Fue minutos después de las seis de la tarde del martes 29 de septiembre que Melany Martínez salió de la empresa TBM Carriers, trasnacional dedicada al transporte de mercancías en Canadá, Estados Unidos y México. En la misma oficina se albergan tres empresas: Distribuidora Promesa, Grupo Promesa y TBM Carriers, de esta última, la joven era la encargada. La compañía, localizada en Avenida Francisco I. Madero segunda sección de la Zona Centro de Mexicali, es de un solo sentido, corre de Poniente a Oriente, forzosamente los agresores debieron estar fuera del establecimiento esperando su salida porque el ataque fue casi de inmediato. La joven alcanzó a subir a su vehículo y emprendió unos pocos metros cuando fue alcanzada por otro auto compacto en cuestión de segundos, un agresor disparó en dos ocasiones con un arma corta calibre .40; la primera bala no dio en el blanco, la segunda fue fatal. El vehículo Jetta modelo 2016 con placas de circulación AKN3498, ya sin control, se impactó contra una camioneta donde viajaba una pareja que esperaba que cambiara el semáforo, posteriormente se subió a una banqueta, donde se detuvo. La maniobra fue profesional, los agresores lograron huir sin ser detectados, incluso en los primeros momentos de confusión la gente pensó que se trataba de un simple choque vehicular, por ser una zona del distrito médico, inmediatamente llegó una ambulancia, los paramédicos intentaron revivir a Melany. Al percatarse de que no tenía pulso, retiraron la intravenosa, fue hasta ese momento que se percataron del impacto de bala en el cuello y, debido a la falta de sangrado, ya no había nada que hacer. Según información dada a conocer por el Servicio Médico Forense la mujer presentó un disparo en el cuello con entrada del lado izquierdo en su tercio medio y salida del lado derecho a la misma altura, por lo que el atacante debió estar a la misma posición que la conductora. La bala entró a nivel cervical, seccionando la médula espinal sin romper ninguna vena importante del cuello, por ello no hubo sangrado. Francisco Acuña Campa, director del Servicio Médico Forense (SEMEFO), explicó que en ese tipo de heridas se presume que las lesiones interfieran en la carótida, pero no fue así: “Si se rompe la carótida se desangran, pero no agarró ningún vaso sanguíneo, agarró la medula espinal, la partió en dos y eso secciona la neurotrasmisión”, por lo que su corazón dejó de latir. El cuerpo de Melany fue liberado hasta las 8:00 pm del miércoles 30 de septiembre, y fue entregado a su esposo Pietro Francisco Cázares Cuevas para ser velada esa misma noche. Luego del reporte, agentes de las distintas corporaciones policiacas iniciaron un operativo de vigilancia, pocos datos pudieron recabar en el momento, entre los agentes había desconcierto sobre todo por la forma en que se realizó la ejecución, pero también al ver que la víctima era una joven sin antecedentes penales y que hasta ese momento no se le había relacionado a delincuencia organizada. El vehículo registrado a nombre del suegro, Francisco Cázares Ferracín, tampoco cuenta con antecedentes penales, Según el Registro Público de la Propiedad, posee tres viviendas, dos en granjas del Oasis y otra en Montecarlo, titularidad que comparte con Mayra Cuevas Cebreros, madre del esposo de la occisa. De igual manera los padres de Melany, José Luis y Hermelinda, no cuentan con registros que pudieran da una pista de lo que sucedió. Inicialmente hubo una línea que ubicó a la víctima como supuesta esposa de Francisco Cázares Martínez, un traficante detenido en Sonora en 2011, y que el asesinato era un mensaje para él, pero las autoridades la desecharon. La PGJE aún no tiene una línea de investigación clara del trasfondo de la ejecución, incluso no descartan se trate de una confusión o una advertencia hacia algún miembro de su familia. Para el coordinador de Investigaciones Especiales (antes Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada), David Lozano Blancas, las cámaras de seguridad son una pista de los agresores, pero afirmó que tienen otros indicios que por secrecía de la investigación, no dio a conocer. Agregó que no han podido descartar ninguna línea de investigación, que la joven no tenía antecedentes penales y que se está realizando una revisión de su entorno familiar, laboral y personal. Lozano confirmó que hasta el momento se tienen registrados 20 homicidios de mujeres por hechos violentos, de los cuales en ocho se encuentran adelantadas las investigaciones. El agente ministerial no toma en cuenta las siete muertes de féminas que fallecieron en el asilo del Ejido Querétaro, pese a que el dictamen de Bomberos afirma que el incendio fue intencional, esto se debe a que en sus pesquisas no han encontrado elementos que pudieran ir en la misma línea de investigación. Será hasta que el dictamen de la Procuraduría General de la República (PR) se concluya, cuando se muestren avances en el tema. Homicida detenido El jueves 1 de octubre, la PGJE emitió un boletín informando que a través de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales consignó a Cristian Gerardo Ochoa Felipe “El Fugas” por su probable responsabilidad en el doble homicidio de Martín Aguilar Moreno, de 52 años, y de Christian Iván Aguilar González, de 21 -padre e hijo-, cometido el 12 de septiembre de 2015 en la colonia Villas de Baja California. El móvil reportado fue el robo. ENVIPE: más víctimas y menos confianza en el Ejército El miércoles 30 de septiembre, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), reveló los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE), en la que estima que durante 2014 hubo más víctimas de delitos y menos confianza en instituciones como el Ejército y Marina. El propósito de la ENVIPE 2015 es generar información a nivel nacional y por entidad federativa sobre el fenómeno de la victimización delictiva, al mismo tiempo sobre la percepción social respecto de la seguridad pública y el desempeño de las autoridades. “Las dos (instituciones) que aumentaron con mayor proporción, o de manera relativa, su percepción de corrupción, fueron el Ejército y la Marina, es la primera vez que sucede esto en la historia de las cinco ENVIPE que hemos presentado, que el Ejército y la Marina traen una afectación tanto en percepción de corrupción como de confianza por parte de los ciudadanos”, señaló Adrián Franco, director general de Estadísticas de Gobierno del organismo, durante la presentación de la encuesta levantada entre marzo y abril de este año. Mientras en 2014, el 84.4 por ciento de la población confiaba en la Marina, para 2015 bajó a 81.6%. En el caso del Ejército, pasó de 57.7 a 56.2%, y la Policía Federal, en 2014 tuvo 57.7 y al año siguiente 56.2%. La confianza ciudadana en las Fuerzas Armadas bajó para 2015, la percepción de corrupción de ambas instituciones aumentó. El ejercicio estadístico muestra que el nivel de corrupción de la Marina pasó de 13.7 a 17.3%, y el del Ejército pasó de 20.3 a 25.1, en comparación al año pasado. Según la encuesta realizada por el INEGI, el número de mexicanos víctimas de delito aumentó en 2014 al pasar de 22.5 millones de personas registradas en 2013, a 22.8 millones. De acuerdo con las cifras, a diferencia de otros años, las mujeres fueron las principales víctimas de ilícitos con el 51.4%. En lo que refiere a los tres delitos más frecuentes por entidad federativa en 2014, en Baja California destacaron: extorsión, robo parcial del vehículo y robo a casa habitación. Sembradío de mariguana destruido y bodega cateada Cuando los militares llegaron, era el mediodía del viernes 25 de septiembre y las 5 mil 100 metros de parcelas estaban abandonadas. Solo quedaron rastros: ropa, alimento y hasta de las casas de lona que usaron los vigilantes para dormir. Integrantes del 28 Batallón de Infantería de la II Zona Militar estuvieron ahí porque es la parte que les corresponde para atender denuncias, vigilar la zona o hacer reconocimientos terrestres y aéreos. El camino es accidentado, pues se deben recorrer entre 12 y 15 kilómetros desde la carretera libre al municipio de Mexicali, a la altura del penal de “El Hongo”. De hecho, el camino que desemboca prácticamente en el plantío corre directamente desde ahí. De acuerdo a la información que proporcionaron los elementos castrenses, esa tarde se realizaba un reconocimiento terrestre, una inspección sin elementos para presumir la existencia del plantío de mariguana. Presumen que vigilantes y cultivadores (por la cantidad de droga calculan entre 3 y 4), pudieron percatarse de su presencia con el tiempo suficiente para retirarse. El cultivo, separado en dos partes por una pequeña vereda, se encontró rodeado por alambre metálico de gallinero, que se utiliza para evitar la invasión de roedores. Era regado por un sistema de goteo a través de tubos de plástico de media pulgada, que se conectan con dos pequeños pozos artificiales. Para evitar la localización de la mariguana por los cielos, la camuflaron construyendo palapas con hierba seca. Por las características del suelo, los militares argumentaron que bien podría tratarse del primer cultivo, cuyas semillas –por el tamaño de la planta– debieron tener entre 3 o 4 meses de haber sido sembradas. Al día siguiente del hallazgo, durante la ceremonia de integración de 108 jóvenes a las actividades de la segunda compañía del Servicio Militar Nacional, el comandante de la Segunda Región Militar, Moisés García Ochoa, mencionó que durante este 2015, son 700 los plantíos localizados en Baja California y Sonora. Otros aseguramientos Por otra parte, la Policía Estatal Preventiva (PEP) aseguró 2 mil 715 kilogramos de mariguana, distribuidos en mil 909 paquetes. Lo anterior, a consecuencia de una persecución automovilística que terminó en el fraccionamiento Santa Fe V, adonde llegaron elementos de la Agencia de Investigación Criminal para sacar la droga el viernes 25, con la orden de cateo. De acuerdo a información generada por la Secretaría de la Defensa Nacional el martes 29 de septiembre, otro decomiso de 2 mil 651 kilogramos de mariguana se dio en la Garita Internacional de Otay, donde en coordinación con el Servicio de Administración Tributaría, se encontró la droga en el interior de un camión de carga. Mientras que el sábado 26 de septiembre, elementos de la II Región Militar, detuvieron a dos personas en San Luis Río Colorado, Sonora, quienes tenían en su poder 18 kilogramos de ‘cristal’. Más cocaína El 28 de septiembre, en la colonia El Pípila, también elementos de la PEP arrestaron a un sujeto en posesión de 10 kilogramos de cocaína y 35 mil dólares. El detenido responde al nombre de Vladimir Barragán Quiroz. Dos días antes, en la colonia Loma Dorada, detuvieron a Aarón Benjamín Valenzuela Chávez, por traer consigo dos kilogramos de la misma droga.