Con la facilidad de comercialización en otras entidades federativas como Sonora y Baja California Sur, el robo de vehículos sigue siendo uno de los principales delitos cometidos en el Estado, ya que en solo ocho meses, se reportaron 7 mil 500 denuncias. Actualmente las bandas delincuenciales tienen dos objetivos primordiales: los vehículos “viejos”, modelos 1995 hasta 2002, que son principalmente utilizados para desmantelarlos y usarlos para partes; el otro, los modelos recientes que son llevados a otras entidades. Las camionetas y pick-ups 4×4 tienen como mercado ilegal Sonora, con el fin de poder utilizarlos para el transporte de personas y droga para cruzar hacia Estados Unidos, además de que sus motores son muy cotizados en el mercado. También vehículos de reciente modelo son llevados hacia Baja California Sur, aprovechando una tramitología menos complicada, por lo que son regularizados para su venta de manera local, debido a que en esa entidad pueden alcanzar un sobreprecio de hasta un 50% mayor que en Baja California, lo que conlleva un incentivo para el robo y traslado a esa localidad. Incluso la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que al menos 400 unidades fueron localizadas en esa entidad, la mayoría con documentación en orden. Por su parte, el subprocurador de la PGJE en Ensenada, Marco Antonio Chavarría, afirmó que se ha presentado un auge en la compraventa de vehículos fronterizos en Baja California Sur, derivado de un alza en los precios de autos nacionales, por lo que muchas personas se dedican al tráfico de automóviles robados en Mexicali y Tijuana. “Son principalmente modelos atractivos y más recientes que tienen mercado en Baja California Sur, los trasladan regularmente hasta Guerrero Negro, Loreto, Los Cabos y La Paz, y como hay lugares de venta de vehículos tipo tianguis, ahí es donde se venden este tipo de autos”, expuso Chavarría. Señaló que a raíz de las investigaciones realizadas con los propios indiciados, esos vehículos se los llevan para su venta a BCS porque es más fácil introducirlos, “toda vez que la reglamentación para dar de alta un vehículo es mucho más sencilla, no hay tantas medidas de control”. Además, las personas que compran un vehículo no realizan una investigación antes de adquirirlo, o en ocasiones, no los regularizan. Según el subprocurador, derivado de esa investigación se ha realizado un convenio de colaboración con Baja California Sur para realizar operativos en establecimientos como tianguis, yonkes y centros de almacenaje de vehículos. En cuanto a los carros más atractivos para Baja California Sur, son desde modelos 2006 a 2010, cuya importación se permite, además de que su uso es principalmente de trabajo; por ellos escogen marcas como Honda y Nissan, así como los que se caracterizan por ser de lujo. En cuanto a la forma de operar, se han detectado desde delincuentes menores, quienes se encargan de realizar el robo y el traslado a otro Estado, hasta bandas vinculadas al crimen organizado. Por su parte, la procuradora de Justicia del Estado de Baja California, Perla del Socorro Ibarra Leyva, dijo que en esta modalidad no existe cifra negra, por lo que las denuncias son precisas y, asegura, existe una disminución en cuanto a los números en comparación a otros periodos. Es en Mexicali donde habrían tenido mejores resultados, ya que presumen una disminución del robo en 30 por ciento, lo que representa cerca de mil vehículos menos en lo que va del año. Aun así, en la capital del Estado se han registrado 2 mil 744 vehículos en los primeros ocho meses de 2015, mientras que en toda la entidad se contabilizan 7 mil 519 denuncias. También en San Luis Francisco Vázquez Bustamante, comandante de la Policía Preventiva y Tránsito Municipal de San Luis Río Colorado, Sonora, señaló que el fenómeno del robo vehicular se da en dos sentidos: uno con el fin de desmantelaros para partes, y otro en el que va “sobre pedido”. “Nosotros traemos un antecedente de seguridad pública en San Luis, el vehículo que roban en lo que es la ciudad de Mexicali o algún otro municipio, son vehículos que tienen ciertas características, como son vehículos pick-up, doble tracción o vehículos que son de carga, esos no se quedan en la ciudad, si se los roban en Mexicali los trasladan a Sonoyta, Puerto Peñasco o Caborca; y por sus características, los utilizan para el cruce o atravesar parte del desierto”. El robo de vehículo que sucede en San Luis es de baja cuantía, las características de los más sustraídos son: Toyota, Nissan, Honda en los modelos 1995 a 2002; la finalidad es desmantelarlos y vender partes y refacciones en el Valle de Mexicali. Según Vázquez, en agosto se tuvo un reporte de 20 vehículos robados, los cuales en su mayoría fueron a parar a Baja California Sur, debido a la cercanía que existe con esa entidad. Señaló que San Luis tiene una incidencia delictiva mucho menor que otras ciudades cercanas de Sonora, pero que se tiene mayor relación con la que ocurre en Baja California, ya que las mismas bandas que trabajan en la ciudad, lo hacen en el Valle de Mexicali. “Es una misma área que el delincuente utiliza para poder ejercer su campo de acción, yo te puedo decir que la situación y la comunicación que existe con Mexicali y San Luis son muy estrechas”, afirmó el jefe policiaco. En relación a los vehículos sobre pedido, citó que se trata de unidades con capacidad para conducirse fuera de camino con la finalidad de cruzar la zona del desierto y transportar drogas o indocumentados; por lo regular fueron robados en Mexicali. “Te puedo decir que la zona comercial está a cuatro minutos del puente del Río Colorado y, una vez cruzando, ya están en territorio de Baja California, entonces, es bien importante que el vehículo que fue sustraído en esa zona comercial y trasladado, el propietario todavía ni se da cuenta”, comentó Vázquez Bustamante. Confirmando esta versión, Alejandro Monreal Noriega, director de Seguridad Pública Municipal de Mexicali, argumentó que el tema se trata cada viernes con la PGJE y demás instancias del Gobierno del Estado, a las que se ha sumado la Policía Federal para combatir el robo de vehículo. Para Monreal, la estrategia ha dado buenos resultados al disminuir la incidencia delictiva en un 23 por ciento -con relación a 2014-, aunque en junio y agosto la cifra superó los 400 robos mensuales. El funcionario municipal agregó que es importante trabajar en la prevención en cuestión de estrategia, por lo que se analiza el comportamiento de los lugares donde comúnmente dejan desmantelados los vehículos ubicados en las orillas de la ciudad y Valle de Mexicali. “Es importante ver la cuestión de los vehículos sobre pedido en Sonora, por eso la importancia de la Policía Federal con estas mesas de trabajo, vienen a cerrar la pinza en todos los vehículos que salen de nuestro círculo de seguridad en la ciudad y que agarran carretera federal”, explicó el mando. Entre las rutas utilizadas para sustraer los vehículos hacia Sonora, están Luis B. Sánchez y carretera San Luis Río Colorado. De acuerdo con la autoridad consultada, en agosto se giraron 15 órdenes de aprehensión por un grupo especial coordinado por la PGJE y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) para frenar el delito. “Es ir sobre la cabeza, no ir sobre los ayudantes, eso ha venido a despresurizar la cuestión del robo, nos estamos midiendo cada semana y la última semana de cada mes reforzamos, porque el comportamiento así lo maneja, como es fin de mes, se preparan y trabajan más, entonces tenemos que redoblar esfuerzos para cerrarles las puertas”, detalló el titular de la SSPM. En Mexicali los carros más robados son Nissan Sentra, Toyota y Honda en sus modelos 1990 a 2000, los cuales son destinados al mercado de partes, además de los vehículos sobre pedido principalmente por el valor del motor como Ford, doble rodado, diésel y pick-ups como Tahoe o TrailBlazer, las cuales salen inmediatamente del municipio. “Nos llaman la atención los vehículos sobre pedido que se los tienen que llevar a como dé lugar, eso es lo que tratamos de evitar, que haya gente lesionada por llevarse su vehículo” indicó. En cuanto a las zonas de desmantelamiento, estas se encuentran el Ejido Villa Zapata e Islas Agrarias, en el sur del Valle de Mexicali; Michoacán de Ocampo y Cerro Prieto, mientras que en el poniente de la ciudad, en la zona de Los Santorales, sobre todo en las parcelas. “Hemos trabajado mucho con los módulos de riego porque los desmantelan y los queman, entonces lo que no queremos es que salgan afectados los predios agrícolas o la cosecha de la gente por un acto delictivo”, indicó el funcionario municipal. Entre las acciones a realizar, se contemplan 23 operativos en chatarreras en 2015, con lo que se han cerrado 150 lugares irregulares como recicladoras instaladas dentro de las colonias que no tienen el uso de suelo, con el fin de que se regularicen. En cuanto a la utilización de vehículos para cometer delitos, solo representa del 15 al 20%, y las zonas donde se comete el mayor número de robo siguen siendo las plazas comerciales, hospitales y lugares en donde se llevan a cabo eventos masivos. “En la zona central es donde hay más robo de vehículos en este periodo, después el oriente y, por último, el poniente; el Valle de Mexicali es esporádico”, puntualizó Alejandro Monreal en referencia a que se estima, en Mexicali operan tres bandas delictivas. Desinformación Existe desinformación respecto al robo de vehículos, incluso por parte de agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal; ejemplo de ello fue un reporte en la colonia Cuauhtémoc Norte el sábado 5 de septiembre, en Mexicali. Elementos que se encontraban a dos cuadras no acudieron al lugar, debido a que atendían una infracción de tránsito; posteriormente llegó otra patrulla para solicitar los mismos datos que fueron entregados a l Centro de Control, Comando, Comunicación y Cómputo (C4). Los agentes señalaron que la denuncia se tenía que interponer en la Unidad de Investigación de Delitos Contra Robo ubicada en Lázaro Cárdenas, cuando en realidad son las encargadas de dar seguimiento; la entidad encargada de atenderlas es el Modulo de Justicia Alternativa Anáhuac, ubicado a un costado de la Comandancia de Policía. Luego de esperar por espacio de una hora, atendió el Agente del Ministerio Público, quien evidenció que el error es común entre los municipales, pese a que se han girado varios oficios para informarles adonde deben canalizar a los quejosos. Posteriormente se informa que en un lapso de 48 horas, oficiales de la PGJE devolverán la llamada, aunque esto no siempre ocurre. Hasta ahí la investigación en muchos de los casos.