Este martes falleció en el penal de máxima seguridad del Altiplano, el ex jefe operativo del grupo criminal de Los Zetas, Sigifredo Nájera Talamantes “El Canicón”, quien fuera vecino de celda del evadido narcotraficante Joaquín “El Chapo” Guzmán. De acuerdo con información proporcionada por el gobierno federal, el presunto sicario murió en la enfermería del Centro Federal de Readaptación Social número 1, en Almoloya de Juárez, Estado de México, víctima de un paro cardiorespiratorio. Durante el pase de lista realizado ayer, “El Canicón” presentó un malestar que ameritó atención e internamiento en el área médica del reclusorio federal, donde murió tras sufrir la afección cardiaca. Nájera Talamantes era procesado por delitos contra la salud, portación de armas de fuego de uso exclusivo del ejército y delincuencia organizada, entre otros. Al ex jefe de los Zetas se le vinculaba con el multihomicidio de nueve soldados, los atentados al consulado de Estados Unidos y a las instalaciones de Televisa, en Monterrey. El hoy occiso se hallaba en prisión desde el 25 de marzo de 2009 y durante su internamiento le fueron aplicados diversos correctivos disciplinarios por faltas cometidas al reglamento del centro penitenciario. A raíz de la fuga del “Chapo” Guzmán, a Sigifredo y otros reclusos que habitaban el pasillo 2 del área de Tratamientos Especiales se les investigó por los hechos, lo que motivó protestas de éstos ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos y otras instancias.
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