De relámpago

La expectativa de la noche del 28 de agosto se consumó en un ejercicio de aciertos, sorpresas y errores que enmarcaron el recital de Zoé en Tijuana. Protagonizando la velada, León Larregui, Sergio Acosta, Jesús Báez, Ángel Mosqueda y Rodrigo Guardiola, se enfrentaron a un público distinto, de diversas generaciones, y en un inmueble donde contrario a lo acostumbrado, los seguidores permanecieron (casi todo el tiempo) sentados, coreando y moviendo sus manos, mientras ellos emulaban sonidos y ritmos. Rodeados por las miradas de arriba hacia abajo, a las 12:27 am del sábado 29 de agosto, el quinteto abrió la presentación interpretando “Dos Mil Trece”, extraída de su más reciente álbum, “Programatón”, logrando una atmósfera de furor y adrenalina en los rostros de los presentes que atestiguaron la ejecución de percusiones, teclados, tambores y cuerdas. “Hay muchos jóvenes, estos no toman mucho”, precisó una mesera del Palenque de la Feria Tijuana 2015, que paseaba de un lado a otro sin poder vender alcohol como en otras presentaciones del inmueble, donde quedaron fotografiados los intentos de baile de Larregui que desdibujaron el desplazamiento de las luces inteligentes. Entre coros y gritos, Zoé detuvo el tiempo para insertar los versos y beats de “10 am” y “Fin de Semana”, mientras las pantallas plasmaron el andar del vocalista por el redondel. Sujetos a un calor bochornoso, los ánimos de los músicos dejaron a deber a los tijuanenses, quizá un tanto molestos por la baja calidad del audio. “Muchísimas gracias Tijuana, como siempre un honor estar aquí, esta fue de las primeras ciudades que visitamos, tienen un gran lugar en el corazón. Gracias por venir esta noche”, subrayó León para luego cantar “Último Día”, del álbum “Reptilectric”, y “Vía láctea”, extraído de su disco “Memo Rex Commander y el Corazón Atómico de la Vía Láctea”. Seduciendo con los gráficos en las pantallas, Zoé implantó sus temas sobre el espacio y el universo con líneas de tinte filosófico, haciendo por momentos que el público se pusiera de pie, bailara, aplaudiera uniformemente y cantara, a pesar de la distorsión y eco de la voz del cantante. “Nada” y “Arrullo de Estrellas” se sumaron a la corta presentación de la banda capitalina formada en 1995, y que a la fecha celebra cinco álbumes de estudio. “¿Cómo se la están pasando?”, cuestionó Larregui previo a darle espacio a la popular “Poli”, y la nueva versión de “Andrómeda”, ilustrada a detalle como un sueño astral. Posteriormente, exhibiendo el contenido sonoro en pantallas de leds, Zoé presentó “Labios Rojos” como un gran tema radial, en el que Larregui aprovechó para brindar con su público levantando un vaso rojo en señal de “salud”; acto seguido se despidieron interpretando “Cámara Lenta”, causando el descontento de muchos. Luego de una prolongada pausa de casi diez  minutos, el quinteto regresó al redondel para acatar la petición de sus fans, quienes unieron voces para solicitar “¡Otra!, ¡otra!, ¡otra!”, haciendo retumbar el Palenque, que en su día de inauguración de actividades, alcanzó casi un lleno, con  Zoé esparciendo su magia en miles de corazones. Emocionado el graderío, la madrugada llegó al clímax al ser revividos temas como “Luna”, “Te Soñé” y “No me Destruyas”, con las que Zoé completó su aparición en Baja California, regalando su energía: “Muchas gracias, Tijuana, por todo, esta será nuestra última canción. Gracias por la buena energía. Cuídense, tengan paz. Viva México”, expresó León, quien luego de entonar “Love”, desapareció del redondel junto a sus compañeros. La presentación de los intérpretes hizo enloquecer a buena parte de sus fanáticos, quienes en 2016 podrán deleitarse con el lanzamiento del filme documental “Panoramas”, en el que Zoé plasmará el lado humano de sus integrantes, luego de registrar su gira internacional por Europa, Estados Unidos y Sudamérica. El quinteto ha comentado que “Panoramas” es un homenaje a la vida de ser músico que, no solo es componer, sino de unirse como hermanos y amigos de toda la vida, viajar juntos, soportarse en todo momento y sobrevivir. La banda sonora del filme incluirá temas originales que serán lanzados en su nuevo álbum, mientras que el documental no incluirá entrevistas, siendo el quehacer musical, el único testimonio de la banda.