20 parejas gay se amparan en Ensenada

Aparentemente contra toda voluntad, los Juzgados Séptimo y Noveno de Distrito, con sede en Ensenada, resolverán dos amparos colectivos que interpusieron veinte parejas del mismo sexo con el fin de unirse en matrimonio. Los respalda el abogado Alí Méndez, mejor conocido como “el padre de las bodas gay en México”. El miércoles 2 de septiembre, Luis Aguilar llegó inquieto al Juzgado Noveno, al mismo tiempo con una sonrisa por la responsabilidad de llevar en dos cajas llenas de hojas duplicadas, los amparos. Sobre estas, un instructivo que le dictaba paso a paso cómo entregar el documento. Nada tendría que salir mal. Después de todo, el primer paso para que 40 personas reciban este derecho se dio. “A ver, buscar al oficial de partes común, me van a pedir que espere, me darán un acuse de recibido”, repitió Aguilar en varias ocasiones en la ventanilla del edificio.  Para la comunidad ensenadense, este tema es “tabú”, pero en el Ayuntamiento nada está en discusión, porque tanto la oficial mayor, Rocío López Gorozave, como el alcalde Gilberto Hirata Chico, tienen un acuerdo de acatar la Ley y conceder a las parejas del mismo sexo una ceremonia digna, donde incluso se puede incluir en la campaña de matrimonios colectivos a los homosexuales. “No le veo ningún problema porque, al ordenarnos a nosotros que los casemos, pueden entrar en campaña. Tienen que ser tratados de igual manera”, aclaró el presidente municipal, para después expresar que por ningún motivo se organizarán campañas especiales para matrimonios igualitarios porque no harán diferencias. Hirata Chico invitó a los interesados a seguir el proceso legal y acercarse al Registro Civil, donde hay lineamientos que seguir. “Yo tengo que seguir los procedimientos donde, obviamente, ya saben qué viene, les doy la negativa y ya con eso solicitan el amparo con el abogado, ya cuando ganen, el juez ordena y acato la resolución. No va a haber ningún problema, tanto el presidente municipal como yo estamos de acuerdo”, indicó por su parte la oficial mayor. Hirata Chico reiteró que acatará lo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) le ordene, y sobre integrar a la campaña de matrimonios colectivos a las parejas del mismo sexo, dijo que lo revisará, pero de ninguna manera “nos opondremos a acatar lo que la Ley manda”. “Yo no tengo que anteponer mis pensamientos personales, mis creencias, simplemente debo acatar la Ley. Ellos no tienen por qué temerle a nada”, reafirmó el primer edil.  El amparo es sólo un trámite que se prevé tardará de tres a cuatro meses, luego de que la SCJN avalara la unión entre homosexuales, y en tanto el Congreso del Estado siga sin realizar las modificaciones a la Ley en Baja California. A principios de junio, la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual y Transgénero (LGBT) del puerto se acercó a las oficinas del Ayuntamiento para solicitar un permiso para instalar un módulo en la Playa Municipal y aplicar pruebas rápidas -cinco minutos- de detección de VIH Sida, como parte de una campaña  que se lleva a cabo para prevenir enfermedades venéreas. La diferencia en esta ocasión, era que miembros de la asociación viajaron desde la Ciudad de México a Baja California para inspeccionar el trabajo. El laberinto inició desde la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), a cargo de Enrique Villarreal Montemayor, donde les advirtieron que ese trámite lo autoriza Hans Appel Lafarga, director de Alcoholes y Espectáculos Públicos. De ahí los enviaron a la Unidad de Espacios Públicos en la Secretaría de Gobierno, con Jesús Jaime González Agúndez como titular.  “Me dijeron, ‘no… ¿Sabes qué? No es aquí, es en Presidencia’, pero de ahí me regresaron a la Dirección de Seguridad Pública, tengo todas la hojas de recibido, y al último me mandaron a Catastro con Humberto Morales Ríos, que nada qué ver”, detalló Luis Aguilar. Al final, en la Dirección de Espacios Públicos a cargo de Dora María Jiménez Lara, les recibieron un pago de 400 pesos por un permiso que los organizadores se quedaron esperando. “Nos pusimos en Playa Hermosa, y de ilegales, porque el permiso nunca llegó”, platicó uno de los integrantes, quien guardó el anonimato.   La iniciativa de Comunidad Cultural de Tijuana LGBTL, A.C. La iniciativa la tuvo el grupo Comunidad Cultural de Tijuana LGBTL, A.C, quienes invitaron a los de Ensenada. Más que contraer matrimonio, explicó Luis Aguilar, la ventaja del amparo colectivo es que al recibir la aceptación se entiende como la oportunidad de poder decidir y demostrar conformidad con lo que se está legislando en Baja California. “Otro beneficio del amparo es que desde el momento que nos llega y mientras no haya modificaciones, pasen cinco, diez, quince o veinte años; tú lo vas a poder presentar en el momento que tú lo decidas, entonces lo vemos más como un acto de hacernos presentes y participar para que vean a la comunidad”, agregó Aguilar. Por su parte, el regidor perredista Arturo Serratos presentó una propuesta para exhortar al Congreso del Estado y a su presidente, Julio César Vázquez Castillo, del Partido del Trabajo (PT), para que a nivel estatal se reforme la Ley y se permita el matrimonio entre personas del mismo sexo, tal como fueron las resoluciones de la SCJN y como sucede en la Ciudad de México. “Lo que podemos hacer en el Ayuntamiento es un exhorto al Congreso del Estado; es lo que está en nuestras manos, pero además, nosotros como partido en el tema de los Derechos Humanos y diversidad sexual, hemos dado la cara sobre todo en las reformas a estas leyes. Por eso nos estamos organizando, para crear la comunidad de diversidad sexual en el partido, para eso invitamos a las organizaciones a hacer un frente común”, detalló Serratos.   Geografía de la homofobia En el mapa del rechazo a las personas con preferencias sexuales distintas a la mayoría, México sobresale como uno de los 66 países con leyes para proteger a los homosexuales de la discriminación, a diferencia de cinco países del continente africano y asiático, donde existe la pena de muerte. Una cosa es que la Ley obligue a los ayuntamientos a celebrar una ceremonia oficial a las parejas del mismo sexo, y otra que sean aceptados por una ciudad, un Estado o el país. El presidente del Congreso del Estado, Julio César Vázquez Castillo, mencionó que este no es un tema que algún diputado traiga en la agenda con urgencia, no obstante, es un derecho que tienen como ciudadanos. “En lo personal, como PT no tenemos el menor problema en sacar el tema porque, lo que sí es un apuro, es garantizar los derechos de estas personas, que al final tienen que dejar herederos”, opinó. El miércoles 2 de septiembre, una pareja de mujeres que desde hace meses recibió un fallo a favor por la SCJN, se presentó en las oficinas del Registro Civil, pero apenas se acercaron para pedir requisitos y contraer matrimonio en septiembre.       Con amparo, se casa primera pareja gay en Tijuana   Mediante un juicio de amparo, Luis Vargas y Michael Bujazán contrajeron matrimonio en Tijuana, convirtiéndose así en la primera pareja del mismo sexo en casarse en esta ciudad. Aunque en junio de 2015, la SCJN declaró inconstitucionales los códigos civiles de aquellas entidades donde el matrimonio es entendido como la unión entre hombre y mujer, la pareja requirió un amparo para poder ejercer este derecho. “Pretender vincular los requisitos del matrimonio a las preferencias sexuales de quienes pueden acceder a la institución matrimonial con la procreación es discriminatorio, pues excluye injustificadamente el acceso al matrimonio a las parejas homosexuales que están situadas en condiciones similares a las parejas heterosexuales”, falló la Suprema Corte en la  tesis de la jurisprudencia 43/2015, publicada el 19 de junio y cuya obligatoriedad entró en vigor el 22 de junio de 2015. El inicio del trámite legal de Luis y Michael inició en septiembre de 2014. Casi un año después, el 26 de agosto de 2015, el oficial 1 del Registro Civil declaró a los contrayentes “en nombre de la Ley y ante la sociedad, unidos en matrimonio”, se puede leer en el acta emitida en Tijuana. En el documento también se detalla que esta acción corresponde “a lo que la Ley ordena” y en cumplimiento a los juicios de amparos 833/2014 del Juzgado Cuarto de Distrito y 825/2014 del Juzgado Sexto de Distrito, ambos radicados en Baja California. “Nuestro estatus legal como tijuanenses y mexicanos ahora es el mismo que el de ustedes, cumplimos con responsabilidades como pagar el Predial y, cuando llegamos a pagarlo, nadie nos pregunta si somos gay”, explicó la pareja en conferencia de prensa realizada el lunes 31 de agosto, conforme mostraban sus recibos de pago. “Cuando vamos a la iglesia y pasan la canasta, tampoco nos preguntan si somos gay ni nos rechazan nuestros billetes. Ahí sí todos somos parejos. Es la única forma en que podemos ver la inconsistencia de la moralidad y el prejuicio cuando estamos participando con la sociedad. No se nos restringe la aportación económica por ser gay”. El abogado de la pareja, José Luis Márquez, también representó a Víctor y Fernando, primera pareja homosexual en contraer matrimonio en Baja California y a la cual se le negó, en repetidas ocasiones, el derecho a casarse en las oficinas del Ayuntamiento de Mexicali, pese a que una orden judicial los amparaba. El caso, que llegó a la SCJN, es uno de los cinco amparos revisados por este órgano, mediante el cual se dio la declaratoria general de inconstitucionalidad de condicionar el matrimonio entre un hombre y una mujer. Respecto a las autoridades del Ayuntamiento de Tijuana, el abogado opinó: “No hicieron más que su trabajo. Si ellos hubieran respetado desde un principio la Constitución, no hubiera habido necesidad de un amparo”. Sin embargo, reconoció como un “buen indicador” la falta de obstáculos para realizar el matrimonio y lo consideró un triunfo en materia de Derechos Humanos. Luis y Michael, quienes llevan 13 años como pareja, agradecieron el antecedente marcado por Víctor y Fernando en Mexicali, en defensa del derecho al matrimonio. “Esta batalla no la hubiéramos podido ganar hace 14 años”, refirió Michael sobre los avances en el reconocimiento de los derechos civiles de la comunidad LGBT. En Baja California se han tramitado alrededor de 20 amparos por parte de parejas del mismo sexo para contraer matrimonio, de los cuales la mitad ya fueron otorgados. Inés García