Pese a que los diputados del Congreso del Estado han prometido que antes de que finalice el presente año quedará resuelto el conflicto de los límites territoriales entre Rosarito y Ensenada, “mucho me temo que al final de cuentas el problema va ir a parar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación”, afirmó Andrés Armenta González, coordinador del Grupo Interdisciplinario para la Defensa del Territorio de Ensenada (GIT).