El único homicidio de los 14 cometidos entre el jueves 30 de julio y el jueves 6 de agosto en Tijuana, que la autoridad aún no ha relacionado con el narcomenudeo, ocurrió el 3 de agosto pasadas las cuatro de la tarde. Antelmo López Leal de 44 años recibió un balazo en la cabeza mientras se encontraba en el área de estacionamiento de su domicilio localizado en la calle Popocatépetl 4777 en Cumbres de Juárez, delegación Zona Centro. López era empleado de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT) con sueldo de 26 mil 800 pesos mensuales y puesto de chofer binacional. También era propietario de un taxi con número económico TijTs 4782. La esposa dijo desconocer la razón del ataque, solo explicó que su marido estaba de vacaciones, pero normalmente trabajaba cruzando residuos a Estados Unidos en unos accesos que tiene la CESPT a la altura de la avenida Internacional. También explicó que los únicos problemas que le había comentado era que al cruzar, a veces, los migrantes se subían al camión, pero llegaban los agentes de Estados Unidos, los bajaban y ya.
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