Cuando le entregaron a su hija, Gloria Bautista no supo que Blanca Jazmín estuvo bajo custodia del DIF Estatal desde marzo cuando la encontraron abandonada, que en abril habían solicitado a algunos medios difundir la pesquisa, y que acudieron a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) a denunciar abandono hasta el 26 de junio. Para marzo, de hecho, ya habían pasado casi seis meses desde que le robaron a su pequeña y desde que la fiscalía estatal emitió la alerta Amber por su desaparición. Pero fue registrada en el DIF como expósito (bebé abandonado), y entró a la estadística de 17 menores que desde enero del 2014 han llegado a algún albergue en esa calidad. No supo –ahora lo sabe—, que la localización de su hija no se debe precisamente al resultado de una investigación, sino a que la abogada encargada del caso de Blanca en el DIF, la identificó en una cuenta de Facebook de María Elena Maldonado, responsable del delito tipificado como sustracción de menores. La imagen fue difundida por la PGJE para reactivar la alerta Amber generada en octubre, a razón que el 11 de agosto pasado, a María Elena se le detuvo por el robo de Yamilé, otra bebé más. Blanca Jazmín a un mes de cumplir su primer año La Procuraduría para la Defensa del Menor y la Familia del DIF, acepta que sí supo que la PGJE estaba investigando su desaparición, pero que por el crecimiento físico de la pequeña, cuando la tenían bajo su resguardo ya no la pudieron identificar. No obstante, no se denunció el abandono hasta tres meses después que la encontraron. La ubicación de Blanca Jazmín se dio gracias a la investigación y ubicación de Yamilé, de no haber sido así, seguiría bajo custodia del Estado. Cuando separaron a Blanca de Gloría Del 22 de septiembre al 31 de octubre del 2014 –durante su primer mes de vida—, Blanca Jazmín fue criada con lo que su madre ganaba como trabajadora doméstica. Con esa experiencia llegó Gloría a Tijuana hace más de un año, cuando por primera vez salió de San Sebastián, Oaxaca. Aquí no tiene a nadie, no sabe nada del padre de su hija y si a alguien le pide apoyo es a una de sus vecinas, a la que conoció precisamente cuando trabajó limpiando su casa. Es por eso que el día del robo, el viernes 31 de octubre, Gloría estaba sola con su hija en brazos afuera del Hospital General de Tijuana. A falta de dinero y exceso de confianza, aceptó viajar al centro junto a una desconocida. Segada por el hambre y una credulidad que dice no volverá a repetirse, le “encargó” a la pequeña mientras compraba comida y agua en la tienda Soriana de la avenida Revolución, momento que María Elena Maldonado aprovechó para ejecutar uno de los dos robos de menores que se le conocen. A petición de la PGJE, Maldonado no obtendrá libertad bajo fianza y podría alcanzar una pena máxima de 10 años de cárcel por cada delito. Pendiente está la localización de Ever Martínez Zaragoza, su ex pareja. El DIF y sus pesquisas El martes 31 de marzo de este año, policías municipales llegaron a una dirección que se les indicó desde el C4. Un reporte ciudadano al 066 alertó sobre un bebé abandonado en la vía pública. Antes de saber que se trataba de Blanca Jazmín, los uniformados la llevaron con el Juez Calificador de la delegación La Presa y éste a su vez la envió a la Procuraduría para la Defensa del Menor y la Familia, adonde se remiten menores abandonados, descuidados o violentados. La titular de la dependencia, Consuelo Luna, asegura que el procedimiento no marca que se dé avisó a la PGJE sobre el hallazgo, pero que sí se denunció por “posible omisión de cuidados e incumplimiento de obligaciones porque fue encontrada en la vía pública”. Además, refiere que se puso en marcha una pesquisa a título de la dependencia que encabeza, y que se pidió apoyo a los medios de comunicación para difundirla. No obstante, la denuncia ante la fiscalía estatal se realizó hasta el 26 de junio, casi tres meses después de que fue encontrada en abandono, mientras que la pesquisa fue recibida por medios entre el 15 y 30 de abril. De acuerdo a la información entregada por la propia Procuraduría para la Defensa del Menor, solo un medio de comunicación impreso en Tijuana (El Mexicano) y una televisora (Canal 12) recibieron la pesquisa, los demás son radiodifusoras como Radio Mexicana, Radio Cadena, Radio Latina, Radio Enciso, Z-13 y Pulsar. Otros informativos a los que se les pidió apoyo fueron el periódico Ecos de Rosarito y la radiodifusora La Voz del Valle de San Quintín, pero hasta el mes de mayo. Semanas después del 31 de marzo, se informó también a las subprocuradurías para la Defensa del Menor en Playas de Rosarito, Mexicali, Tecate y San Quintín. Cabe mencionar que en esta redacción no hay registro de la solicitud del DIF para difundir la información. DIF sabía de la alerta Amber Consuelo Luna acepta que la PGJE sí informa al DIF cuando se libera una alerta Amber como la del mes de octubre del 2014 por el robo de Blanca Jazmín. “No es la primera vez que algún menor buscado por sus padres es encontrado en alguno de nuestros albergues. Sin embargo como te mencionaba la alerta fue en octubre del 2014, tuvimos conocimiento pero en ese momento la menor no se encontraba con nosotros”. Cuando María Elena y Ever la tenían Reafirmó que no se “da aviso como tal” a la PGJE, y que si no se dieron cuenta de que se trataba de la menor desparecida hacía meses, fue por la manera en que una persona de esa edad cambia en corto tiempo. “El viernes (14 de agosto), la abogada que tiene asignado el expediente de Blanca Jazmín, al momento de conocer de la reactivación de la alerta Amber que hace la procuraduría de justicia, y ver en la fotografía que se publica donde la menor aparece, en esa fotografía la menor tiene una edad aproximada a cuando ingresó con nosotros. Las niñas son muy parecidas y con base en el cotejo dimos aviso al Ministerio Público informando que creíamos que la menor podía encontrarse con nosotros”. Para evitar más bebés perdidos en el DIF El viernes 14 de agosto, Gloría Bautista acudió al DIF, pero sin saber de qué se trataba para “no levantar falsas expectativas”, le dijeron que tenía relación con una menor albergada, para lo que se tenía que hacer una prueba de ADN. “Obtuvimos la confirmación positiva y con las fotografías, cuando estábamos prácticamente seguros que se trataba de la menor”, continúa Consuelo Luna. Por su parte, el subprocurador de justicia en Tijuana, Jorge Álvarez Mendoza, explicó que esta situación es un motivo para redoblar esfuerzos en el cotejo e intercambio de información entre instituciones como CAPEA, la Agencia de Delitos Sexuales de la procuraduría y el DIF “para tratar de evitar una situación similar”. Evitarlo no sería de mayor complejidad considerando que desde enero de 2014 son 17 bebés los que han llegado al DIF y que actualmente, con la recuperación de Blanca, no hay denuncias por sustracción de menores abiertas. Es decir, si se da una investigación nueva, sería cuestión de cotejar con los 17 bebés albergados. Si planteamos que entra al DIF otro bebé (abandonada), y hay alguna investigación, se cotejarán los datos. “El problema es, te voy a poner un ejemplo: puedo encontrar una niña que no la están buscando pero se desapareció hace tres años. Desafortunadamente no podríamos hacer un banco de ADN de todos los niños porque sería un poco complejo, pero de niños expósitos no son muchos”. Reiteró: “Todos llegamos a la conclusión de que debido a las circunstancias de que no teníamos identificación, fotografías, la forma de identificar a la niña, es por eso que hasta que obtuvimos la nueva evidencia, las nuevas imágenes, es que hilamos toda la situación”. Los bebés y los carros En Baja California, el robo de un vehículo es grave, el de un bebé no. Así está establecido en el Código de Procedimientos Penales de Baja California, de ahí la diferencia de que exista el derecho de obtener libertad bajo fianza o no. El diputado Juan Manuel Molina, presidente de la Comisión de Justicia del Congreso del Estado, explicó que aunque exista una reforma a nivel local, terminaría por ser inconstitucional y al responsable le sería sencillo ampararse. La razón es la reforma constitucional en materia penal del 2008 y el Código Penal Federal, que tampoco incluye dentro de los delitos clasificados como graves y que no alcanzan fianza, el robo de menores. “Independiente de que uno tenga una opinión en uno u otro sentido, porque a mí me parece que este tema es de suma gravedad, lo cierto es que conforme a las nuevas reglas de la reforma del 2008 federal, en donde se establecieron las bases para la implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal en la República, el único facultado para establecer qué delitos graves son o no son, es el legislador federal”.