Un cierre poco afortunado

Ricardo Arjona cerró su gira “De Viaje” en Ensenada la noche del sábado 27 de junio, después de resolver algunos incidentes que atrasaron su concierto. Fue en Bodegas del Valle, lugar que por primera vez se utilizaba para ofrecer un espectáculo artístico y que no contaba con las condiciones óptimas para llevarlo a cabo (el suelo no estaba parejo, ni plano, la tierra estaba muy suelta, entre otros aspectos), lo cual provocó desperfectos al momento de comenzar a colocar la escenografía del artista, cuya pantalla de alta tecnología y 25 toneladas, hizo que el entablado comenzara a hundirse, al no soportar el peso; lo que originó que el show del guatemalteco peligrara ante una cancelación, producto del mal estado del lugar. Pasadas las 8:30 pm, finalmente liberaron el permiso a la empresa promotora para que el concierto pudiera realizarse, situación que retrasó por más de tres horas el inicio del espectáculo. El deseo de Arjona era cerrar su gira por México exitosamente, por ello, ordenó se hiciera todo lo posible para solucionar los inconvenientes y así arrancar con el último show de su viaje en territorio azteca. Una grúa que sostuvo la pesada pantalla, fue la solución que encontraron para que el cantautor pudiera cumplirle a 2 mil 500 personas que asistieron, quienes se armaron de paciencia en parte de la tarde-noche, observando desde detrás de las vallas cómo poco a poco habilitaban el lugar. Sin haber terminado de colocar mesas, sillas y vallas, los organizadores tuvieron que abrir las puertas a las 10:40 pm y, finalmente, después de las 11:00 pm, Arjona salió al escenario dispuesto a remunerar el trago amargo que sus fanáticos habían pasado ante la larga espera.   “Un concierto en el cual les garantizo, será una noche inolvidable y mágica” Pese al infortunio del que no fue culpable, Ricardo Arjona se plantó en el entablado con el único propósito de satisfacer a sus seguidores, presentando un show de nivel musical impecable, cargado de visuales y parafernalia. A ritmo de “A la Luna en Bicicleta”, “El Problema” y “Acompáñame a Estar Solo”, el recital comenzó, mientras la algarabía y frenesí de sus seguidores  que coreaban cada tema, denotaba que éstos rápidamente habían dejado atrás el incidente. “Buenas noches Ensenada, no ha sido fácil este día. Yo quiero agradecer al equipo de gente que viene conmigo para hacer posible que estemos esta noche acá, todo apuntaba que era imposible, hemos tenido que padecer un poquito pero ya que estamos aquí, yo estoy esta noche para lo que Ustedes se les dé la gana”, manifestó el artista. Continuó  su viaje musical que, apoyado por una enorme pantalla con tecnología de punta, contaba visualmente cada historia que se interpretaba en el entablado. Temas como “Cuando”, “Sin Ti, sin Mí”, “Desnuda”, “Invertebrado”, “Piel Pecado” y “Cavernícolas”, fueron el combo ideal para un público que correspondía con aplausos y cánticos al regalo sonoro que el cantautor les estaba ofreciendo. Entre bicicletas, carros, una banca, la estación de un tren, una ciudad y más, Ricardo Arjona revistió con escenografía cada canción, convivió con el público, agradeció su presencia y subió a una “Señora de las Cuatro Décadas”, a la que le ofreció su respectiva serenata. Con la complicidad de sus músicos, el artista envolvió a su público entre el romance y el desamor, sentimientos que contagiaron a más de uno al escuchar “Historias de un Taxi”, “Lo Poco que Tengo”, “Te Quiero”, “Apnea” y “Fuiste Tú”. Luego dejaría la parafernalia de lado para regalar un set acústico que le valió los aplausos más intensos de la noche y los cánticos que emanaban del público, contagiaron de alegría al artista: “Me Enseñaste”, “Quién Diría”, “Tu Reputación” y “Realmente No Estoy tan Solo”.  Después dos horas de actuación, el tren que llevará a Arjona a su travesía por Centroamérica llegó a la “Estación Viaje” de Ensenada y, antes de partir, el guatemalteco brindó el tema “Mujeres”.