Un loro gritaba en el medio de la selva: “¡Soy el rey de la selva, soy el rey de la selva! En eso lo escucha un león y le da una paliza que lo deja inconsciente. A la semana siguiente despierta en una jaula y dice: “¡Qué paliza le tuve que dar al león, que me metieron preso!”. Autor: Un presumido.