Las reacciones y análisis a nivel mundial pronto empezaron a surgir ante la segunda “fuga” de Joaquín “El Chapo” Guzmán del penal de “máxima seguridad” conocido como Centro Federal de Readaptación Social número 1 Altiplano, en Almoloya de Juárez, el sábado 11 de julio a eso de las 8:52 de la noche, a través de un túnel de poco más de kilómetro y medio. El doctor Edgardo Buscaglia, investigador principal de la Universidad de Columbia en Nueva York y presidente del Instituto de Acción Ciudadana en México, expresó en entrevista con Semanario ZETA sobre el momento político en que se “escapó” el singular personaje: “Me llama mucho la atención que Guzmán Loera no se haya escapado antes de las elecciones, él podría haber hecho esto antes de las elecciones y no después. Ciertamente, se rompió un acuerdo al momento en que se escapa, un acuerdo que seguramente fue lo que explica por qué se le detuvo bajo condiciones totalmente irregulares donde básicamente se le empezó a buscar por el departamento en donde él estaba sin la guardia pletoriana que normalmente lo acompañaba, guardias que estaban en una condición básicamente de espera; se le empezó a buscar en febrero del año pasado. Por qué se escapó ahora es muy interesante: ¡El tiempo político le permitió al PRI ganar las elecciones!”. Evidentemente, expresó Buscaglia, tanto el Presidente como el Secretario de Gobernación se erigen ahora como los grandes “perdedores”: “Peña Nieto ha sido el perdedor de esta fuga; lo mismo que Osorio Chong que tenía una aspiración presidencial, por lo menos desde el ámbito internacional su reputación ha sido dañada permanente con esto”. El reconocido investigador lamentó la ausencia de renuncias en casos como la segunda “fuga” de “El Chapo”: “En un país de gobernabilidad promedio, el gobierno renunciaría, eso sucedería en cualquier país con gobernabilidad promedio, o sea, habría renuncias en el gabinete empezando con Osorio Chong, pero en México eso no va a ocurrir, hay mucha impunidad, la gobernabilidad es muy precaria por lo tanto no se le aplican premios y castigos a los funcionarios federales; el Presidente debería pedirle la renuncia a sus ministros y secretarios de manera inmediata, pero la pachanga continúa en Francia”. Aunque Osorio Chong regresó a México el domingo 12 de junio tras el “escape” de Guzmán Loera, el investigador Buscaglia lamentó: “No veo por ahora que el Presidente esté adelantando su regreso a México; hasta donde tengo entendido quiere participar en la pachanga del 14 de julio; entonces, la sensación que a mí me da es que no vas a ver cabezas rodando (renuncias) desde el punto de vista político metafórico en este caso; va a haber mucho show, seguramente van a hacer renunciar o procesar a autoridades operativas a nivel penitenciario, seguramente ahí si vas a encontrar procesamientos”. “El presidente seguramente va a generar mucho humo mediático dando a entender que se están procesando a los implicados que van a ser siempre personas de bajo nivel operativo del sistema penitenciario, seguramente los va a procesar y utilizar como chivos expiatorios, pero no creo que veas una renuncia de Osorio Chong o de Monte Alejandro Rubido, aunque deberían renunciar”. Buscaglia advirtió que no solo Osorio Chong debe regresarse de Francia, sino también Enrique Peña Nieto: “Peña Nieto debería regresar, por supuesto, es una crisis de seguridad nacional, es una crisis de seguridad histórica que Guzmán Loera esté intentando generar una alianza entre las redes criminales más importante del continente porque se da cuenta que los grupos criminales han venido sufriendo grandes pérdidas debido a la competencia pública que han venido teniendo en México y Centroamérica; Guzmán Loera ha sido uno de los líderes delincuentes que ha estado propiciando una alianza en las grandes redes criminales hemisféricas para que cooperen y no compitan y puedan capturar a los Estados y a sus negocios mucho mejor que antes, generando tasas de retorno económicas mucho más altas cuando tú cooperas con otras redes criminales que cuando uno compite. “Entonces, este hombre (Guzmán Loera) representa una amenaza a la seguridad hemisférica, y el Presidente Peña Nieto si fuese realmente un presidente funcional debería retornar de inmediato al país para hacerse cargo y liderar de alguna manera el proceso de investigación y de captura de este hombre (Guzmán Loera), pero no veo que esta sea la intención, por lo menos a corto plazo, hasta donde yo sé la pachanga continúa por el 14 de julio; no veo que se estén tomando las medidas para que este hombre retorne, sus reacción es el reflejo de la crisis de gobernabilidad que vive México”. Además, el académico se refirió al poder del Cártel de Sinaloa: “La red criminal Sinaloa está entre las cinco más poderosas del planeta; es la primera del continente americano en cuanto a poder patrimonial y capacidad de infiltración en los Estados”. Finalmente, Buscaglia sentenció a propósito de su advertencia en su libro “Vacíos de poder en México” (Debate, 2013): “México está en una crisis de vacío de gobernabilidad de enormes proporciones que no tiene el presidente de México desde la Revolución Mexicana, es decir, no estamos viendo que el Presidente Peña Nieto se esté tomando esta crisis en serio”.